Pascale y la Aventura de las TWICE

Era una soleada mañana en la ciudad de Buenos Aires, cuando Pascale, una niña curiosa y valiente, decidió dar un paseo por el parque. Con su sombrero de colores y su mejor amigo, un perrito llamado Roco, se sentía lista para cualquier aventura que pudiera encontrar.

Mientras caminaban por el sendero, Pascale escuchó un bullicio extraño. Al acercarse, vio un grupo de chicas cantando y bailando. Eran las TWICE, un famoso grupo de música que había llegado a la ciudad para dar un concierto. Pascale y Roco se quedaron boquiabiertos, observando cómo las cantante se movían con gracia y energía.

Sin embargo, algo no estaba bien. De repente, el sonido mágico de su música se interrumpió. "¡Ayuda!"- gritó Nayeon, la líder del grupo. "Nos han robado los instrumentos y no podemos realizar el concierto sin ellos!"-

Pascale, emocionada por conocer a sus ídolas, decidió que debía ayudar. "No se preocupen, yo les ayudaré a recuperar sus instrumentos. ¿Dónde los vieron por última vez?"-

"Estaban justo aquí en nuestro escenario, pero unos traviesos niños los robaron y se fueron corriendo hacia el bosque"- explicó Momo, con maquillaje aún brillando en su rostro.

Sin pensarlo dos veces, Pascale dijo: "¡Vamos Roco, que tenemos una misión!"- Y se adentraron en el bosque.

Mientras caminaban, Pascale y Roco se encontraron con muchos obstáculos, como ramas caídas y raíces enredadas. "¡Roco, ayúdame a mover esa rama!"- exclamó Pascale. Juntos, lograron despejar el camino.

De repente, escucharon risas de niños. "¡Eran ellos!"- murmuró Pascale. Sigilosamente, se acercaron y vieron que un grupo de niños estaba jugando con los instrumentos de las TWICE. "¡Eso no se hace!"- gritó Pascale. "¡Esos son los instrumentos de las TWICE!"-

Los niños se dieron vuelta y, en vez de asustarse, se rieron. "¿Y qué? No son de nadie!"- dijo uno de ellos. "¡Pero son muy importantes y hacen feliz a mucha gente!"- insistió Pascale, tratando de razonar con ellos.

"¿Y a nosotros qué nos importa?"- preguntó una niña rubia que sostenía una guitarra. Pascale reflexionó y, en un intento por unirlos, dijo: "¿Qué tal si las TWICE vienen a cantar con nosotros si les devolvemos los instrumentos? ¡Podríamos tener una fiesta todos juntos!"-

Los ojos de los niños brillaron al escuchar eso. "¿De verdad?"- preguntó el niño que había tomado una batería. "¡Sí! Pero primero tenemos que devolver los instrumentos"- dijo Pascale con una sonrisa, convenciendo a los niños.

Juntos decidieron devolver los instrumentos, y mientras marchaban de vuelta, Pascale les contó sobre la música y cómo hace que todos se sientan felices. "La música no solo se escucha, también se siente, se comparte. ¡Es para todos!"- dijo, inspirando a los niños que empezaron a entender el valor de la música.

Al llegar al parque, las TWICE los estaban esperando. "Gracias, Pascale! ¡Ustedes son unos héroes!"- dijo Sana, abrazando a Pascale y a los niños que habían ayudado. "Gracias por devolver nuestros instrumentos. Ahora podemos hacer nuestra fiesta!"- agregó Jihyo, sonriendo ampliamente.

Los niños, que antes habían robado, se unieron al grupo, y todos juntos comenzaron a cantar. Pascale, Roco y las TWICE se unieron al baile, creando una fiesta que todos recordarían por siempre. La música llenó el ambiente, y todos los niños, sin importar si eran delincuentes o no, se fusionaron en un solo ritmo.

La tarde se llenó de risas, baile y alegría, y Pascale aprendió que, a veces, solo hace falta un poco de razón y un gran corazón para cambiar la situación. Al final de la fiesta, las TWICE le entregaron a Pascale un micrófono especial y una invitación para su próximo concierto.

"¡Gracias, Pascale! Siempre recordaremos tu valentía y tu bondad"- dijeron las chicas mientras los niños aplaudían con entusiasmo. "Nos encontramos de nuevo en el futuro!"-

Pascale volvió a casa con Roco, su corazón lleno de música y amistad, sabiendo que aunque todas las aventuras pueden parecer complicadas, siempre hay un camino hacia el entendimiento y la alegría compartida.