Agatha y Candy en el Planeta X


Agatha era una niña muy curiosa, siempre quería saber más sobre el mundo que la rodeaba.

Un día, mientras paseaba con su perra Candy por el parque, miró al cielo y se preguntó qué había más allá de las nubes. "Candy, ¿te imaginas si pudiéramos viajar al espacio?"- dijo Agatha. La pequeña perra movió la cola emocionada y ladró en señal de acuerdo. De repente, un extraño hombre apareció frente a ellos.

Era un científico loco llamado Dr. Zoom que había estado trabajando en una nave espacial para enviar animales al espacio. "¡Hola! Soy el Dr. Zoom y he venido a ofrecerles la oportunidad de viajar por el espacio juntos.

"-dijo mientras les mostraba su última creación. Agatha estaba emocionada ante esa posibilidad y sin pensarlo dos veces aceptó la oferta del Dr. Zoom. "¿Qué esperamos? ¡Vamos!"- exclamó Agatha mientras subían a la nave espacial junto con Candy.

El viaje comenzó y todo parecía ir bien hasta que algo salió mal en el motor de la nave haciendo que pierdan control y se desvíen del rumbo original.

La nave termina estrellándose en un planeta desconocido donde los habitantes eran seres extraños con tentáculos verdes como brazos y ojos grandes como pelotas de tenis.

Agatha estaba asustada pero recordó todas las cosas que había aprendido acerca del respeto hacia otros seres vivos y decidió hacer amigos con los extraterrestres ofreciéndoles algunas golosinas para perros que llevaba en su mochila. Para sorpresa de todos, los extraterrestres adoraron las golosinas y empezaron a jugar con Candy. Agatha se dio cuenta que, aunque eran diferentes, podían tener cosas en común y disfrutar juntos.

"¡Mira Candy! ¡Hemos hecho amigos en el espacio!"- dijo emocionada mientras acariciaba a su perra. Finalmente, después de algunos días explorando el planeta desconocido y aprendiendo sobre sus habitantes, el Dr.

Zoom logró arreglar la nave espacial para poder regresar a casa. Agatha se despidió de sus nuevos amigos extraterrestres con la promesa de volver algún día para visitarlos nuevamente. "Candy, ¿te das cuenta? Exploramos un planeta desconocido y conocimos seres increíbles gracias a nuestra curiosidad.

"- dijo Agatha mientras abrazaba feliz a su perrita. Ambas volvieron al parque donde habían comenzado todo y se sentaron en un banco para descansar.

Agatha miró al cielo una vez más pero esta vez sabía que había mucho más allá de las nubes y estaba ansiosa por seguir explorando lo desconocido junto con su fiel amiga Candy.

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