Aliste y las emociones mágicas

Aliste era un niño muy valiente y aventurero al que le encantaba jugar a juegos de terror en su consola. Una tarde, mientras estaba concentrado jugando su juego favorito, su mamá subió a despertarlo pensando que estaba durmiendo.

"¡Aliste, es hora de bajar a comer!", llamó su mamá desde la puerta de su habitación. Aliste se levantó emocionado y bajó corriendo las escaleras para disfrutar de una rica merienda con su madre y su hermana.

Después de comer, Aliste volvió rápidamente a su habitación para continuar jugando. Mientras tanto, su mamá y su hermana se quedaron en la cocina charlando animadamente sobre sus planes para el fin de semana.

De repente, escucharon un fuerte golpe que provenía del piso de arriba. "¿Qué habrá sido eso?", preguntó la hermana de Aliste con preocupación. Su mamá se levantó rápidamente y subió las escaleras seguida por la hermana de Aliste.

Al llegar a la habitación de Aliste, encontraron la puerta cerrada y escucharon ruidos extraños desde adentro. "¡Aliste! ¿Estás bien?", preguntó su mamá golpeando la puerta. No hubo respuesta.

Preocupadas, decidieron abrir la puerta lentamente y encontraron a Aliste mirando fijamente la pantalla de su consola con los ojos muy abiertos. "¡Aliste! ¿Qué pasó? ¿Por qué ese golpe tan fuerte?", preguntó su mamá con angustia.

Aliste les contó que había perdido una partida importante en el juego y por frustración golpeó accidentalmente el escritorio con fuerza. Les explicó que no era nada grave y prometió ser más cuidadoso en el futuro. Su mamá aprovechó esta oportunidad para enseñarle sobre cómo manejar las emociones cuando se siente frustrado o enojado.

Le recordó lo importante que es mantener la calma y controlar sus acciones para evitar accidentes como este en el futuro. Desde ese día, Aliste aprendió a controlar mejor sus emociones mientras jugaba e incluso les enseñaba a otros niños cómo hacerlo también.

Se convirtió en un ejemplo para todos gracias a esta experiencia educativa que le ayudó a crecer como persona responsable y consciente.