Amigos Conectados

Había una vez un grupo de amigos en la escuela que siempre estaban pegados a sus celulares. Pasaban horas y horas jugando, viendo videos y chateando con otros amigos.

Pero lo que ellos no sabían era que el uso excesivo del celular podía ser peligroso. Un día, mientras caminaban hacia la escuela, uno de los amigos llamado Juan estaba tan distraído mirando su celular que se tropezó y cayó al piso.

Por suerte no se lastimó gravemente pero esto fue un gran susto para todos. - ¡Juan! ¿Estás bien? - preguntaron preocupados sus amigos. - Sí, gracias por preguntar. Solo me torcí un poco el tobillo - respondió Juan mientras guardaba su celular en el bolsillo.

Los amigos se dieron cuenta de lo peligroso que podía ser estar tan distraídos con sus celulares todo el tiempo. Así que decidieron hacer algo al respecto.

- Chicos, creo que necesitamos tener más responsabilidad cuando usamos nuestros celulares - dijo Sofía. - Tienes razón Sofi, podríamos establecer algunas reglas para usarlos de manera segura - agregó Lucas. - Sí, como por ejemplo no usarlos mientras caminamos o cruzamos la calle - propuso Martina.

- Y también limitar nuestro tiempo de pantalla durante las clases y actividades escolares importante - interrumpió Tomás. Así fue como juntos crearon una lista de reglas para usar sus celulares de manera segura y responsable.

Se comprometieron a seguirlas para evitar cualquier tipo de accidente o problema causado por el uso excesivo del celular. Sin embargo, pronto descubrieron que seguir las reglas no era tan fácil como parecía. A veces se olvidaban de ellas y volvían a caer en sus malos hábitos.

Un día, mientras estaban jugando en el parque durante el recreo, Sofía recibió un mensaje importante de su mamá. Pero estaba tan concentrada jugando que no lo vio hasta mucho después.

- ¡Sofi! ¿No vas a contestar ese mensaje? - preguntó Tomás. - Oh no, se me había olvidado por completo. Gracias por recordarme - dijo Sofía mientras sacaba su celular del bolsillo y respondía rápidamente el mensaje.

Ese pequeño error le hizo darse cuenta de lo importante que era seguir las reglas para usar su celular de manera segura y responsable. Así que decidió ser más consciente y prestar más atención a su entorno cuando usara su teléfono móvil.

Los amigos siguieron trabajando juntos para mejorar sus hábitos con los celulares. Con el tiempo, lograron establecer una rutina saludable donde podían disfrutar del uso de sus teléfonos sin poner en peligro su seguridad o la de los demás.

Y así fue como aprendieron la importancia del uso seguro del celular, la responsabilidad y trabajar juntos para lograr un objetivo común.