Amigos en la selva
Había una vez en la selva un puma llamado Leo, que era el más rápido y fuerte de todos los animales. Un día, mientras cazaba, se encontró con una pequeña liebre llamada Lola.
- ¡Hola, amiguito! ¿Qué haces por aquí? -preguntó curioso Leo. - Hola, señor Puma. Estoy buscando comida para mi familia. Somos muy pequeños y débiles, así que necesitamos buscar alimento constantemente -respondió Lola con timidez.
Leo sintió compasión por la liebre y decidió ayudarla a encontrar comida. Juntos recorrieron la selva en busca de zanahorias y lechugas para la familia de Lola. Durante ese tiempo, Leo y Lola se hicieron amigos inseparables.
Un día, mientras caminaban por el bosque, escucharon un rugido a lo lejos. Era un oso furioso que se acercaba hacia ellos. - ¡Lola, corre tan rápido como puedas! Yo me encargaré del oso -dijo Leo valientemente.
Lola asustada corrió lo más veloz que pudo mientras el puma enfrentaba al feroz oso. Con astucia y agilidad, Leo logró despistar al oso y salvar a su amiga liebre. Desde ese momento, la amistad entre Leo y Lola creció aún más fuerte.
Se convirtieron en los mejores compañeros de aventuras de toda la selva. Juntos exploraban cada rincón del bosque, ayudándose mutuamente ante cualquier peligro que se presentara. Un día, cuando menos lo esperaban, se encontraron con una enorme roca imposible de escalar para ambos.
Parecía ser el final del camino. - No te preocupes Lola; yo tengo una idea -dijo Leo con determinación.
El puma tomó impulso y saltó sobre la roca con todas sus fuerzas para luego extender su cola hacia abajo y ayudar a subir a su amiga liebre hasta lo alto de la roca. - ¡Lo logramos! ¡Eres increíble! -exclamó emocionada Lola. Desde ese día entendieron que juntos podían superar cualquier obstáculo que se les presentara en el camino.
La fuerza y velocidad del puma combinadas con la agilidad e inteligencia de la liebre los convertían en un equipo imparable.
Y así fue como Leo el puma y Lola la liebre demostraron que las diferencias no importan cuando hay verdadera amistad y trabajo en equipo. Juntos vivieron muchas aventuras emocionantes en las profundidades de la selva, inspirando a todos los demás animales a valorar las virtudes únicas de cada uno sin importar su tamaño o fuerza.
FIN.