Amigos en Villa Feliz
En un pequeño pueblo llamado Villa Feliz vivía Brayan, un niño alegre y lleno de energía. Desde que vio por primera vez a Ashley, una niña dulce y risueña, en la escuela, se enamoró perdidamente de ella.
Sin embargo, Ashley no parecía sentir lo mismo por Brayan. Un día soleado, Brayan decidió hacerle una sorpresa a Ashley para conquistar su corazón. Con sus ahorros compró hermosas flores girasol, las favoritas de ella.
Con nerviosismo pero con determinación, se acercó a la casa de Ashley y tocó la puerta. - ¡Hola Ashley! Tengo algo para ti -dijo Brayan con una sonrisa tímida mientras le entregaba las flores.
Ashley abrió los ojos sorprendida al ver el precioso ramo de girasoles y sintió cómo su corazón se conmovía ante el gesto de Brayan. - ¡Oh, son hermosos! Gracias, Brayan -dijo Ashley emocionada. Brayan aprovechó el momento para expresar sus sentimientos hacia ella.
- ¿Ashley, te gustaría ser mi novia? -preguntó tímidamente. Sin embargo, Ashley dudaba en aceptar porque tenía miedo de lastimar los sentimientos de Brayan. Ella sabía que no correspondía sus sentimientos románticos pero valoraba mucho su amistad. - Brayan...
eres un chico maravilloso y aprecio mucho tu amistad. Pero siento que en este momento no estoy lista para tener novio -respondió sinceramente Ashley.
Brayan sintió un nudo en la garganta al escuchar las palabras de Ashley pero decidió aceptarlo con madurez y respeto por sus sentimientos. - Lo entiendo, Ashley. Aprecio mucho tu honestidad. Seguiremos siendo amigos siempre -dijo Brayan con una sonrisa reconfortante. A pesar del rechazo amoroso, la amistad entre Brayan y Ashley se fortaleció aún más.
Compartían risas, juegos y aventuras juntos como los mejores amigos que eran. Con el tiempo, ambos descubrieron nuevas pasiones e intereses que disfrutaban compartir juntos.
Brayan mostraba su creatividad haciendo manualidades mientras que Ashley demostraba su talento artístico pintando bellos cuadros. Un día durante una feria en el pueblo, participaron juntos en un concurso de talentos donde demostraron todo lo aprendido y lograron ganarse el aplauso del público por su increíble actuación en equipo.
Al finalizar la feria bajo las estrellas brillantes del cielo nocturno, Ashely miró a Brayán con admiración. "Gracias Brayán por estar siempre ahí, has sido mi mejor amigo " dijo Ashely con ternura. Brayán sonrió ampliamente, entendiendo que aunque no fueran novios tenian una amistad valiosa.
"Siempre estaré aquí para ti Ashely, gracias por ser parte importante de mi vida " respondió Brayán emocionado. Y así, entre risas y sueños compartidos termina esta historia sobre dos amigos cuya conexión era más fuerte que cualquier romance.
La verdadera amistad puede superar cualquier obstáculo o desafío. Y ellos lo supieron demostrar.
FIN.