Amigos inesperados


En el bosque vivían los super heroes del bosque: un grupo de animales valientes que protegían a todos los habitantes del lugar. Entre ellos estaban el zorro, la ardilla, el búho y el ciervo.

Un día, mientras realizaban su patrulla diaria, se encontraron con una extraña criatura. Era una gargola enorme con alas y garras afiladas como cuchillos. Los super heroes del bosque no sabían qué hacer. "¿Quién eres tú?", preguntó el zorro.

"Soy La Gargola", respondió la criatura con voz grave y profunda. "No nos gustan las cosas nuevas en nuestro bosque", dijo la ardilla desconfiada. La Gargola explicó que había llegado al bosque porque estaba buscando amigos para jugar.

Pero los super heroes no confiaban en ella por su aspecto intimidante. De repente, aparecieron unos elfos mágicos que también vivían en el bosque. Ellos habían oído hablar de La Gargola y querían ayudarla a hacer amigos.

"¡Hola! Somos los elfos mágicos", dijo uno de ellos con una sonrisa amistosa. Los super heroes del bosque se quedaron sorprendidos por la aparición repentina de estos seres pequeños y mágicos. Pero pronto descubrieron que eran muy amigables y divertidos.

Los elfos sugirieron organizar un juego para conocerse mejor entre todos. Así fue como comenzaron a jugar a escondite en todo el bosque, mientras La Gargola volaba por encima vigilando todo desde arriba.

Fue entonces cuando ocurrió algo inesperado: uno de los elfos se lastimó una pierna al tropezar con una rama. Los super heroes del bosque se preocuparon por su amigo herido y trataron de ayudarlo, pero no sabían cómo sanar la lesión.

"Yo sé cómo curarlo", dijo La Gargola acercándose a ellos. Los super heroes del bosque estaban sorprendidos ante la posibilidad de que La Gargola pudiera ayudarlos en algo. Pero ella les explicó que tenía poderes mágicos para sanar heridas.

La Gargola usó sus habilidades mágicas para curar la lesión del elfo, quien rápidamente se recuperó y volvió a jugar con todos los demás.

Los super heroes del bosque y los elfos mágicos aprendieron que no hay que juzgar a alguien por su aspecto exterior o por lo diferente que parezca. A veces, las personas más extrañas pueden tener grandes talentos y habilidades útiles para el grupo.

Así fue como La Gargola encontró amigos en el bosque gracias a esta aventura inolvidable junto a los super heroes del bosque y los elfos mágicos. Y juntos continuaron protegiendo y cuidando el lugar donde vivían.

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