Amigos nuevos, amigos valiosos
Pepe y Juan eran dos amigos inseparables. Siempre jugaban juntos al fútbol en el parque cerca de sus casas. Pero un día, Pepe decidió que quería jugar con otros niños también.
"Juan, ¿por qué no invitamos a Marcos y a Martín para que jueguen con nosotros?", preguntó Pepe. "¡Claro! ¡Me encantaría conocer nuevos amigos!", respondió Juan emocionado. Así fue como Pepe y Juan invitaron a Marcos y Martín para jugar al fútbol.
Al principio, todo iba bien y todos se divertían juntos. Pero luego, Pepe comenzó a ignorar a Juan y solo jugaba con los nuevos amigos. "Pepe, ¿no quieres seguir jugando conmigo?", preguntó triste Juan.
"No ahora, estoy ocupado jugando con mis nuevos amigos", respondió Pepe sin mirarlo. Juan no pudo evitar sentirse excluido e ignorado por su amigo de toda la vida. Sin embargo, decidió no rendirse tan fácilmente.
Se acercó a los otros chicos e intentó unirse a ellos en el juego también. Al principio, los chicos lo rechazaron pero pronto se dieron cuenta de que Juan era un gran jugador de fútbol y lo invitaron a jugar junto con ellos también.
Poco después, todos estaban riendo juntos y divirtiéndose como una verdadera pandilla de amigos. Pepe finalmente se dio cuenta del error que había cometido al ignorar a su mejor amigo por unos pocos juegos más emocionantes.
Se disculpó sinceramente con Juan por haberlo dejado afuera y prometió nunca volver a hacerlo otra vez. De esta manera, Pepe aprendió una valiosa lección sobre la importancia de la amistad y el respeto por los demás.
Y Juan aprendió que a veces hay que ser valiente y tomar la iniciativa para hacer nuevos amigos. Juntos, todos descubrieron que jugar con otros niños también puede ser divertido y enriquecedor.
Desde ese día, Pepe y Juan siguieron jugando juntos al fútbol, pero ahora también compartían sus juegos con Marcos y Martín. Todos se convirtieron en grandes amigos gracias a la sabiduría de Juan y la humildad de Pepe.
FIN.