Amigos peludos
En una pequeña casa en un barrio tranquilo vivían el perro Juanito, un simpático caniche color café, y la gata Claudia, una elegante gata siamesa de pelaje blanco.
Desde que se conocieron, Juanito y Claudia no se llevaban nada bien. Siempre estaban peleando por cualquier motivo: comida, espacio en el sofá o simplemente por diversión. Un día soleado, mientras Juanito jugaba en el jardín persiguiendo mariposas, vio a Claudia caminando con elegancia por el tejado de la casa.
Eso despertó su instinto cazador y decidió ladrarle para asustarla. Claudia, sin inmutarse, lo miró con desdén y siguió caminando como si nada hubiera pasado.
Juanito se sintió desafiado y decidió subir al tejado para demostrarle a Claudia quién mandaba en la casa. Con mucho esfuerzo logró trepar hasta donde estaba ella y comenzó a ladrarle con todas sus fuerzas.
Claudia, tranquila como siempre, le dijo:"Juanito, ¿por qué siempre tienes que estar molestando? Yo solo estoy disfrutando del sol y tú vienes a arruinarlo. "Juanito se quedó sin palabras. Nunca antes había visto a Claudia tan serena y segura de sí misma.
Eso despertó su curiosidad y empezaron a conversar sobre sus gustos e intereses. Para sorpresa de ambos descubrieron que tenían muchas cosas en común. Desde ese día, Juanito y Claudia dejaron de pelearse y se convirtieron en grandes amigos.
Jugaban juntos en el jardín, compartían la comida e incluso dormían la siesta abrazados en el sofá. La rivalidad que había existido entre ellos se transformó en una hermosa amistad basada en el respeto mutuo. Sus dueños notaron el cambio inmediatamente y se alegraron al verlos tan unidos.
Juanito y Claudia demostraron que no importa nuestras diferencias ni prejuicios; lo importante es aprender a conocer al otro y valorarlo tal como es.
Así, entre travesuras y risas, Juanito color café y Claudia color blanco enseñaron a todos que la verdadera amistad puede surgir incluso de las rivalidades más intensas. Y juntos demostraron que la tolerancia y el amor siempre triunfan sobre el odio y los conflictos.
Y colorín colorado este cuento ha terminado pero su mensaje de amor sincero perdurará por siempre jamás dentro del corazón de todos los niños del mundo entero.
FIN.