Amor en el gallinero


Había una vez en un tranquilo gallinero, un huevo solitario llamado Huevo. Huevo siempre se sentía triste al ver a los demás huevos rodeados de amigos y familiares, mientras él permanecía solo en un rincón del nido.

Un día, llegó al gallinero un nuevo huevo llamado Clara. Clara era radiante y alegre, con su cáscara brillante y una sonrisa que iluminaba todo el lugar.

Desde el momento en que sus miradas se cruzaron, Huevo sintió algo especial en su corazón. "¡Hola! Soy Clara, ¿y tú cómo te llamas?" -dijo Clara acercándose a Huevo con entusiasmo. Huevo no podía creer la suerte que tenía de haber conocido a alguien tan maravilloso como Clara.

Juntos pasaban horas charlando, contándose historias y compartiendo sus sueños más profundos. Con el tiempo, la amistad entre Huevo y Clara se transformó en amor. Se volvieron inseparables, compartiendo cada momento juntos y apoyándose mutuamente en todo lo que necesitaran.

Pero un día, una fuerte tormenta azotó el gallinero y los huevos temblaban de miedo ante los truenos y relámpagos. Sin embargo, Huevo tomó la pata de Clara con valentía y le dijo:"Tranquila Clara, yo estaré contigo pase lo que pase.

Juntos podemos superar cualquier adversidad. "Y así fue como juntos enfrentaron la tormenta, demostrando que el amor verdadero puede vencer cualquier obstáculo que se interponga en su camino.

Con el paso de los días, los dos huevos eclosionaron dando lugar a dos hermosos pollitos: uno blanco como la nieve (que llevaba rasgos de Huevo) y otro dorado como el sol (que recordaba a Clara). Los pollitos crecieron felices bajo el cuidado amoroso de Huevo y Clara.

Aprendieron importantes lecciones sobre la importancia del amor incondicional, la valentía para enfrentar los desafíos y la fuerza que surge cuando nos tenemos el uno al otro.

Y así fue como esta historia de amor entre dos huevos solitarios se convirtió en un bello cuento lleno de esperanza y enseñanzas para todos aquellos que aprendieron a valorar lo verdaderamente importante: el cariño sincero hacia aquellos que están cerca nuestro.

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