Amor en la distancia
Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Esperanza, dos jóvenes llamados Jose y Salu. Desde que se conocieron, sintieron una conexión especial que los unió como si fueran dos piezas de un rompecabezas.
Desde el primer día, su relación fue intensa. Se reían juntos, compartían sus sueños y también tenían discusiones acaloradas. Aunque a veces parecía que no se entendían, siempre encontraban la manera de reconciliarse porque su amor era más fuerte que cualquier pelea.
Un día, decidieron embarcarse en aventuras juntos y recorrer el mundo. Viajaron a playas paradisíacas, ciudades bulliciosas y paisajes impresionantes. Cada experiencia fortalecía su vínculo y los hacía sentir más cerca el uno del otro.
Pero llegó el momento en que Salu recibió una oferta de trabajo inesperada en otro país. Debía mudarse y empezar esta nueva etapa sola.
Jose la apoyó en su decisión, aunque por dentro sentía tristeza al pensar en la distancia que los separaría. "No quiero irme sin ti, pero sé que es una oportunidad única", le dijo Salu a Jose con lágrimas en los ojos. "Te extrañaré cada segundo que estés lejos", respondió Jose con voz entrecortada.
A pesar del dolor de la despedida, ambos sabían que debían seguir adelante con valentía. Se prometieron mantener viva la llama de su amor a través de cartas, videollamadas y recuerdos compartidos.
Los meses pasaron volando y Salu se adaptó rápidamente a su nuevo entorno laboral. Sin embargo, algo faltaba en su corazón: la presencia constante de Jose a su lado. Por otro lado, Jose dedicaba cada instante libre a escribirle cartas llenas de amor a Salu.
Le contaba anécdotas graciosas, planes para el futuro e incluso dibujaba caricaturas divertidas para hacerla reír. Una noche estrellada, Salu recibió una carta especial de Jose donde le proponía algo inesperado: viajar juntos por el mundo nuevamente cuando ella regresara del trabajo fuera.
Con lágrimas de emoción corriendo por sus mejillas, Salu tomó una decisión: renunciaría a ese trabajo para estar junto a Jose y vivir nuevas aventuras juntos como siempre habían soñado.
Y así fue como finalmente se reencontraron después de tanto tiempo separados por kilómetros pero unidos por un amor inquebrantable. Juntos descubrieron que las despedidas pueden ser temporales pero las conexiones verdaderas son eternas.
FIN.