Amor en Villa Feliz
Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Feliz, dos amigos inseparables llamados Lucas y María. Lucas era un niño muy travieso y aventurero, mientras que María era dulce y amable con todos.
Ambos compartían momentos maravillosos juntos jugando en el parque, explorando el bosque cercano y riendo sin parar. Un día soleado de primavera, mientras estaban jugando a las escondidas, Lucas se dio cuenta de algo extraño en su corazón.
Cada vez que veía a María sonreír, sentía mariposas revoloteando en su estómago. No entendía qué le pasaba, pero sabía que lo hacía feliz. "María, ¿te gustaría jugar al fútbol conmigo mañana?" -preguntó Lucas nervioso.
"¡Claro que sí! Será muy divertido", respondió María con una gran sonrisa. Lucas estaba emocionado por pasar más tiempo con María, pero también se sentía confundido por esos nuevos sentimientos que despertaba en él.
Decidió hablar con su abuelo Sabino, un sabio anciano del pueblo conocido por sus consejos sabios. "Abuelo Sabino, últimamente siento algo diferente cuando estoy cerca de María. ¡No sé qué significa!" -confesó Lucas preocupado.
El abuelo Sabino sonrió con ternura y le dijo: "Lucas querido, lo que sientes se llama amor. Es un sentimiento hermoso que nos llena de alegría y nos hace querer estar cerca de la persona amada". Lucas quedó asombrado por esta revelación y decidió seguir el consejo de su abuelo.
Se propuso demostrarle a María lo especial que era para él organizando una sorpresa increíble. Con la ayuda de sus amigos del pueblo, prepararon un picnic romántico en el prado con globos coloridos y música alegre.
Esa tarde, Lucas invitó a María al picnic sin revelarle la sorpresa. Al llegar allí, los ojos de María se iluminaron al ver toda la decoración tan hermosa y escuchar la música alegre. "¡Ohhh! ¡Esto es increíble! ¡Gracias Lucas!" -exclamó María emocionada.
Lucas tomó coraje y le dijo: "María, desde hace algún tiempo he sentido algo muy especial cada vez que estoy contigo. Eres mi mejor amiga y también...
¡me gustas mucho!"María se quedó sin palabras por un momento pero luego le dedicó una dulce sonrisa a Lucas. "Yo también siento algo especial cuando estoy contigo, Lucas. Eres un amigo maravilloso.
"Aunque no era exactamente lo que esperaba escuchar, Lucas sintió paz en su corazón al expresar sus sentimientos hacia María. Comprendió que el amor podía manifestarse de diferentes formas y valoraba profundamente la amistad tan especial que tenían juntos.
Desde ese día en adelante, Lucas siguió siendo el amigo fiel de María disfrutando cada momento juntos como siempre lo habían hecho antes.
Aprendió que el amor verdadero no siempre tiene que ser romántico sino puede ser simplemente apreciar la compañía y complicidad de alguien especial en nuestra vida como lo era su querida amiga Maria.
FIN.