Anís y los villanos de la decepción, la frustración y la vergüenza
Anís era una niña como cualquier otra, pero tenía un secreto especial: podía transformarse en la superheroína Anís. Su misión era proteger a los niños y niñas de los miedos que los acechaban.
Un día, la ciudad se vio amenazada por tres villanos terribles: Decepción, Frustración y Vergüenza. Estos villanos habían estado rondando durante siglos, creciendo en poder y tamaño hasta convertirse en una amenaza real. Anís sabía que era hora de enfrentarlos.
Con valentía, se puso su traje brillante y salió a detener a los villanos. -'¡Deténganse, villanos! ¡No permitiré que lastimen a nadie más!', gritó Anís, enfrentando a Decepción, Frustración y Vergüenza. La primera en atacar fue Decepción, que intentaba esparcir su oscuridad por todas partes.
Anís desplegó su mayor arma: la esperanza. Mostró a los ciudadanos que, a pesar de la decepción, siempre pueden encontrar algo bueno. Muchos empezaron a sonreír de nuevo. La siguiente en la lista fue Frustración.
Esta villana hacía que todos se sintieran cansados y sin ganas de seguir adelante. Anís les recordó a todos que el esfuerzo y la perseverancia son las mejores armas contra la frustración. Poco a poco, la gente empezó a sentirse más fuerte.
Por último, Vergüenza intentó hacer que todos se escondieran y se sintieran avergonzados de ser ellos mismos. Anís les mostró a todos que la verdadera valentía está en ser auténticos y no tener miedo de mostrarse tal como son.
La ciudad se llenó de orgullo y alegría. Finalmente, los villanos fueron vencidos y la ciudad volvió a estar a salvo. Anís estaba feliz de haber ayudado a todos a superar sus miedos.
Aunque sabía que los villanos nunca desaparecerían por completo, también sabía que siempre estaría lista para enfrentarlos una y otra vez. La lección que aprendió esa vez, y que enseñó a todos, es que enfrentar los miedos con valentía y apoyo mutuo es el camino para vencerlos.
FIN.