Anita y la aventura en la oscuridad
Anita era una niña muy valiente durante el día, pero cuando llegaba la noche, su habitación se transformaba en un lugar aterrador. La oscuridad le hacía sentir miedo y no sabía cómo superarlo.
Un día, su abuelita le contó una historia sobre un valiente explorador que encontró un tesoro escondido en una cueva oscura. Esa noche, Anita imaginó que ella también era una valiente exploradora y decidió enfrentar su miedo.
Armada con una linterna y su peluche favorito, se adentró en la oscuridad de su habitación. Con cada paso, su corazón latía más rápido, pero se repetía a sí misma: "Soy valiente, soy capaz". De repente, escuchó un ruido misterioso.
En lugar de huir, recordó lo que su abuelita le había dicho: "Los sonidos extraños en la oscuridad suelen ser inofensivos". Decidió seguir adelante y descubrió que el ruido provenía de su peluche, que se había caído.
Anita entendió que a veces, las cosas que tememos en la oscuridad son simplemente objetos familiares. Este pequeño paso le dio la valentía para explorar su habitación y darse cuenta de que no había nada que temer.
A partir de ese día, Anita aprendió a ver la oscuridad de una manera diferente, como un lugar de aventuras y descubrimientos. Y cada noche, antes de dormir, apagaba la luz sabiendo que la oscuridad ya no era su enemiga, sino su aliada para imaginar historias asombrosas.
FIN.