¡Aprendiendo a convivir juntos!

En una pequeña ciudad, había un grupo de animales muy diferentes: gatos, perros, pájaros y conejos. Todos vivían en armonía, pero un día, comenzaron a surgir problemas entre ellos.

Los gatos no querían jugar con los perros, los pájaros se sentían excluidos y los conejos preferían estar solos. La alcaldesa, la sabia tortuga Doña Tita, decidió tomar cartas en el asunto. Convocó a todos los animales a una reunión urgente. "Queridos amigos, veo que están teniendo problemas para convivir juntos.

Es momento de establecer normas de convivencia, respeto y socialización obligatoria", anunció Doña Tita. Los animales se miraron entre sí con sorpresa. "Pero ¿cómo lo haremos?", preguntó un pícaro gato llamado Tomás.

"Con juegos y actividades que nos ayuden a conocernos mejor", respondió la alcaldesa. Así, empezaron a organizar juegos en los que todos participaban, como carreras de obstáculos, concursos de baile y búsqueda del tesoro. Poco a poco, los animales comenzaron a entenderse y a respetarse mutuamente.

Los gatos descubrieron lo divertido que era jugar con los perros, los pájaros encontraron su lugar en el grupo y los conejos se sintieron más seguros al compartir con los demás. La ciudad volvió a estar llena de alegría y armonía.

Los animales aprendieron que, aunque fueran distintos, podían convivir en paz si se respetaban y socializaban entre sí. Doña Tita y su sabiduría lograron que todos entendieran la importancia de seguir las normas de convivencia, respeto y socialización obligatoria.