Ardillas Unidas

Había una vez en el bosque, una ardillita llamada Papá que tenía dos hijos pequeños. Un día, al despertar, se dio cuenta de que no tenían suficiente comida para pasar el día.

Entonces decidió que era hora de salir en busca de más alimentos. Papá les dijo a sus hijos: "Hoy necesitamos encontrar más nueces y frutas para nuestra despensa. Vamos a trabajar duro juntos para conseguirlo". Los tres salieron del nido y comenzaron su búsqueda.

Caminaron por horas sin encontrar nada, hasta que llegaron a un árbol con muchas nueces. Pero había un problema: las ramas estaban muy altas y la ardillita papá no podía alcanzarlas.

"No te preocupes Papá", dijo uno de los hijos, "yo puedo subir al árbol y traer todas las nueces". Y así fue como el hijo trepó el árbol y trajo todas las nueces abajo para compartir con su hermano y su padre.

Después de comer algunas nueces, continuaron buscando más alimentos. De repente escucharon un ruido extraño proveniente del otro lado del bosque. "¿Qué es ese ruido?", preguntó el otro hijo. "No lo sé", respondió Papá, "pero parece algo peligroso".

A pesar del miedo, decidieron investigar qué estaba pasando. Llegaron al lugar donde provenía el ruido y encontraron a un zorro atrapado en una red cazadora. "¡Ayuda! ¡Ayuda!", gritaba el zorro desesperadamente mientras intentaba liberarse.

La ardillita papá sabía que los zorros eran conocidos por cazar a otros animales del bosque, pero no pudo resistirse a ayudar al zorro en peligro. "Hijos míos, tenemos que ayudar al zorro. Vamos a trabajar juntos para liberarlo de esta trampa".

Los tres trabajaron juntos y finalmente lograron liberar al zorro de la red cazadora. "¡Gracias! ¡Gracias!", dijo el zorro emocionado. "Nunca olvidaré su amabilidad". El zorro se fue corriendo y las ardillitas continuaron con su búsqueda de alimentos.

Finalmente encontraron un árbol lleno de frutas y nueces, suficiente para llenar su despensa por varios días. "Excelente trabajo hijos", dijo Papá orgulloso mientras abrazaba a sus dos hijos. "Trabajando juntos podemos superar cualquier obstáculo".

Desde ese día, las ardillitas aprendieron la importancia del trabajo en equipo y la compasión hacia los demás seres vivos del bosque. Y siempre recordaban que cuando trabajan juntos pueden superar cualquier dificultad que se les presente.