Aurora y la búsqueda de colores

En una escuela muy especial, había una niña llamada Aurora que era conocida por su talento artístico. Aurora adoraba pintar, y siempre tenía ideas maravillosas para sus creaciones. Un día, Aurora tuvo la brillante idea de pintar un cuadro muy especial, pero se dio cuenta de que no tenía los colores que necesitaba.

Decidida a encontrar una solución, Aurora se puso en marcha para buscar los colores que le faltaban. Se acercó a sus amigos y les preguntó si tenían pinturas que pudiera usar. - ¿Hola amigos, ustedes tienen algunos colores que me presten para mi cuadro? , preguntó Aurora con entusiasmo.

Sus amigos querían ayudarla, pero ninguno tenía los colores que ella necesitaba. Sin embargo, uno de ellos tuvo una idea. - ¿Por qué no vamos a buscar los colores juntos? , propuso emocionado. Los demás amigos estuvieron de acuerdo y juntos emprendieron la búsqueda de los colores.

Caminaron por el patio de la escuela, exploraron el jardín e incluso revisaron el cuarto de arte, pero no encontraron los colores que Aurora necesitaba. A pesar de la desilusión, Aurora se mantuvo positiva y optimista. Entonces, uno de sus amigos señaló algo en el patio trasero: un hermoso arcoíris.

Aurora se iluminó con una idea. - ¡Claro! Podemos usar los colores del arcoíris para mi cuadro, exclamó emocionada. Sus amigos la miraron sorprendidos y asombrados por la brillante idea de Aurora. Juntos se dirigieron al arcoíris y comenzaron a mezclar los colores en sus paletas, creando una hermosa gama de tonos para el cuadro de Aurora.

Finalmente, con los colores del arcoíris, Aurora pintó el cuadro más hermoso que se había visto en la escuela. Todos admiraron su talento y su creatividad. Desde ese día, Aurora y sus amigos aprendieron que a veces, las soluciones más maravillosas pueden estar justo en frente de nosotros, solo hay que mantener los ojos abiertos y la mente abierta a las posibilidades.