Aventura en la playa de Mateo

En un pequeño pueblo de El Salvador vivía un niño llamado Mateo, quien siempre había soñado con conocer la playa y nadar como los peces.

Un día, Mateo le contó a sus padres, el señor Jairo y la señora Nina, sobre su gran deseo. - Mamá, papá, ¿podemos ir a la playa? Quiero sentir la arena bajo mis pies y sumergirme en el mar como un pez. - preguntó Mateo con entusiasmo.

Sus padres, emocionados por la idea, organizaron un viaje a la playa. Al llegar, Mateo corrió emocionado hacia la orilla y sintió la suave caricia de la arena en sus pies. - ¡Oh, es tan suave y hermosa! - exclamó Mateo con asombro.

Luego, se sumergió en el mar y comenzó a nadar con alegría. Pero de repente, una ola lo arrastró mar adentro. Mateo se asustó, pero recordó lo que le habían enseñado sus padres sobre la importancia de mantener la calma en el agua.

Con determinación, comenzó a nadar de regreso a la orilla. Una vez a salvo, sus padres lo abrazaron con preocupación. - ¡Mateo, estás bien! - exclamó su mamá. - Sí, mamá, recordé lo que me enseñaron.

Hay que ser valientes y mantener la calma en el agua. Gracias por enseñarme eso. - respondió Mateo con valentía. A partir de ese día, Mateo disfrutó de cada momento en la playa, aprendiendo a nadar con precaución y respetando el mar.

Sus padres también aprovecharon la oportunidad para enseñarle sobre la importancia de conocer y respetar el entorno natural. Finalmente, la familia regresó a su pueblo con hermosos recuerdos y la satisfacción de haber vivido una aventura inolvidable en la playa.