Aventuras con Sol

En una granja muy especial vivía Miriam, una niña curiosa y alegre que adoraba pasar sus días rodeada de animales. Un día, mientras alimentaba a las gallinas, encontró un huevo diferente a los demás.

Miriam lo tomó con cuidado y lo llevó a su abuelo, quien le explicó que ese huevo era de un ave exótica llamada Fénix. "-¿Fénix? ¿Qué es un Fénix, abuelo?" -preguntó la niña con asombro.

"-El Fénix es un ave mágica que renace de sus propias cenizas", respondió el abuelo con una sonrisa. Miriam estaba emocionada y decidió cuidar el huevo con mucho amor y paciencia.

Pasaron los días y finalmente el huevo se rompió, revelando a un pequeño Fénix cubierto de plumas brillantes. Miriam lo llamó Sol y juntos vivieron aventuras increíbles en la granja. Una noche, un incendio amenazó la granja y todos los animales entraron en pánico.

Miriam recordó las palabras de su abuelo sobre el Fénix y decidió pedirle ayuda a Sol. El pequeño Fénix extendió sus alas y emitió un resplandor dorado que calmó a los demás animales. Con valentía, volaron juntos apagando las llamas y salvando la granja.

Desde ese día, Miriam entendió el verdadero significado de la magia: no solo estaba en criaturas como Sol, sino también dentro de ella misma. Juntos demostraron que con amor, valentía y trabajo en equipo se pueden superar cualquier desafío.

Y así, la granja de Miriam se convirtió en un lugar lleno de esperanza y alegría para todos sus habitantes.