Aventuras en el bosque mágico

Había una vez tres amigos, Juani, Sofi y Toto, que decidieron ir a acampar al bosque mágico. Llenaron sus mochilas con todo lo que necesitaban: carpas, sacos de dormir, linterna y una rica merienda.

Al llegar al bosque, encontraron un claro perfecto para armar su campamento. Después de jugar un rato, se dio la hora de dormir y se metieron en sus carpas. De repente, se escuchó un ruido extraño, como si algo o alguien estuviera merodeando por el bosque.

"¿Qué es eso?", preguntó Juani preocupado. "No sé, pero tengo miedo", respondió Sofi. Toto trató de calmarlos diciendo: "Tranquilos, seguro no es nada". Pero de pronto, vieron unos destellos de luz en el bosque.

Decidieron aventurarse para descubrir de dónde venían. Al llegar al lugar, se encontraron con hadas y duendes bailando alrededor de una fogata. Los amigos no podían creer lo que veían. Las criaturas mágicas les contaron que estaban celebrando el equinoccio de primavera.

Juani, Sofi y Toto se unieron a la celebración, bailando y riendo con los seres mágicos. Al amanecer, las criaturas les regalaron unas semillas especiales, explicándoles que al plantarlas en su ciudad, ayudarían a mantener viva la magia del bosque.

Con el corazón lleno de alegría, los amigos regresaron a casa, ansiosos por plantar las semillas y compartir su increíble aventura con todos en la ciudad.