Aventuras en la Tierra de los Abuelos
Luli, Juan y Belén estaban muy emocionados porque finalmente habían llegado a Argentina para visitar a su familia. Luego de un largo viaje en avión, descendieron del avión y se encontraron con sus abuelos esperándolos en el aeropuerto.
Luli corrió hacia ellos y los abrazó fuertemente. -¡Abuela, abuelo! ¡Qué felicidad verlos! Los extrañé muchísimo. -¡Oh, querida Luli! Nosotros también te extrañamos mucho.
Estamos tan contentos de tenerte aquí -respondió la abuela mientras acariciaba el cabello de su nieta. Juan y Belén se acercaron rápidamente para saludar a sus abuelos también.
-¡Hola, abuelitos! ¡Cuántas ganas teníamos de estar con ustedes! La familia decidió ir directamente a la casa de los abuelos para pasar tiempo juntos y ponerse al día sobre todo lo que había ocurrido desde la última vez que estuvieron juntos. Durante la cena, compartieron anécdotas divertidas y recordaron momentos especiales.
Al día siguiente, decidieron hacer una excursión al campo para disfrutar del aire libre y explorar la naturaleza argentina. Caminaron por senderos rodeados de árboles frondosos y escucharon el canto de las aves mientras respiraban el aroma fresco del campo.
En medio del paseo, encontraron un arroyo cristalino donde pudieron refrescarse en sus aguas claras. Mientras jugaban en el agua, vieron algo brillante entre las rocas: era una pequeña tortuga atrapada. -Belén, Juan, ¿podrían ayudarme a rescatarla? -pidió Luli con preocupación.
Los tres se acercaron y con mucho cuidado liberaron a la tortuga de su aprieto. La miraron mientras nadaba felizmente en el arroyo. -¡Qué bueno que pudimos ayudarla! -exclamó Juan. -Sí, es importante siempre estar atentos y ayudar a los animales cuando lo necesitan -agregó la abuela.
Continuaron su paseo por el campo y llegaron a un hermoso mirador desde donde podían ver las montañas y el horizonte infinito.
Se sentaron juntos admirando la vista y reflexionando sobre lo importante que era valorar la naturaleza y cuidar de ella. -Estar en contacto con la naturaleza nos ayuda a entender que somos parte de algo más grande, y debemos protegerlo -dijo el abuelo con voz serena.
Después de pasar unos días maravillosos en Argentina, Luli, Juan y Belén regresaron a casa llevándose consigo no solo recuerdos inolvidables sino también una valiosa lección: la importancia de estar unidos como familia y cuidar del entorno natural que nos rodea.
Desde aquel viaje, los tres niños siempre recordaban aquel día en el campo donde rescataron a la tortuga. Cada vez que veían un animalito necesitado o encontraban basura en su camino, actuaban para protegerlo o limpiarlo. Y así aprendieron que pequeños gestos pueden hacer una gran diferencia en el mundo.
FIN.