Avril la superhéroe y el valor de la amistad



En la ciudad de Osorno, existía un jardín de infantes llamado Capullito, donde los niños jugaban, aprendían y sobre todo, se querían mucho. Allí, Avril era conocida por ser una niña valiente que siempre luchaba por lo que era justo.

Un día, unos malvados villanos llamados Donfus y Enebrio llegaron al jardín con un plan para sembrar la discordia y romper el valor de la amistad entre los niños.

Decidieron empezar sus fechorías alejando a los niños uno de otro por medio de rumores y mentiras. De repente, los juegos en el patio se tornaron tristes, y las risas se convirtieron en susurros llenos de desconfianza.

Los niños no entendían lo que estaba sucediendo, pero sentían que algo malo estaba pasando. Avril, con su aguda percepción, notó el cambio en el ambiente del jardín. Decidió investigar y pronto descubrió las maquinaciones de los villanos. Determinada a detenerlos, creó un plan para devolver el valor de la amistad al jardín.

Se acercó a sus amigos y, con valentía, les habló de la importancia de la confianza y la solidaridad, y les recordó lo mucho que se querían.

"Amigos, no podemos permitir que la maldad de estos villanos acabe con nuestros bellos momentos juntos. ¡Debemos unirnos y demostrar que nuestra amistad es más fuerte que cualquier mentira!" -les dijo Avril con determinación. Sus palabras resonaron en el corazón de los niños, quienes, inspirados por su amiga, decidieron poner fin a la división.

Juntos, organizaron una serie de divertidos juegos y actividades que les permitieron pasar tiempo juntos y redescubrir la alegría de la amistad. Donfus y Enebrio, al ver su malvado plan fracasar, huyeron derrotados.

El jardín volvió a ser un lugar lleno de risas, juegos y sobre todo, de amistad. Avril demostró que, con valentía, amor y solidaridad, cualquier mal puede ser vencido.

Desde ese día, los niños del jardín Capullito aprendieron que la verdadera amistad es un tesoro que debe ser cuidado y protegido, y que juntos, pueden superar cualquier desafío. Y así, junto a Avril, siguieron disfrutando de momentos felices, construyendo recuerdos inolvidables y fortaleciendo su amistad cada día.

FIN.

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