Bailemos juntos
Había una vez una niña llamada Yeri Mua, quien era muy talentosa en el arte de crear videos divertidos y entretenidos en TikTok. A Yeri le encantaba bailar, cantar y hacer todo tipo de desafíos virales.
Pero lo que más le gustaba era compartir su alegría con los demás. Un día, mientras grababa uno de sus videos, Yeri vio a un chico llamado Cry.
Era tímido y reservado, pero tenía una sonrisa dulce que capturó el corazón de la pequeña tiktoker al instante. Desde ese momento, Yeri decidió hacer todo lo posible para acercarse a él. Yeri comenzó a seguir a Cry en todas las redes sociales y dejaba comentarios amables en cada publicación que hacía.
También se aseguraba de darle like a todos sus videos y fotos. Sin embargo, Cry parecía no notarla. Pero eso no detuvo a Yeri Mua. Decidió que necesitaba llamar su atención de alguna manera especial.
Así que planificó un video increíblemente creativo donde mostraría todo su talento para el baile y la actuación. El día del gran video llegó y Yeri estaba emocionada por mostrarle al mundo su increíble habilidad para entretener.
Bailó con gracia y energía frente a la cámara mientras interpretaba una canción pegajosa. Después de subir el video, algo inesperado ocurrió: se volvió viral en cuestión de minutos.
La gente comenzó a comentar sobre lo talentosa que era Yeri Mua y cómo había logrado capturar la atención de todos con su carisma único. Entre los muchos comentarios, Cry también notó el video de Yeri.
Quedó impresionado por su talento y se dio cuenta de lo especial que era esa niña tiktoker. Decidió seguirla y comentar en su video: "¡Eres increíble! Me encantaría conocerte". Cuando Yeri vio el comentario de Cry, no podía creerlo. Estaba más emocionada que nunca y respondió rápidamente: "¡Gracias! Me encantaría conocerte también".
Después de intercambiar algunos mensajes, Cry invitó a Yeri a un parque cercano donde podrían conocerse en persona. Ambos estaban nerviosos pero emocionados. Cuando finalmente se encontraron, descubrieron que tenían mucho en común.
Compartieron risas, historias divertidas y hasta bailaron juntos al ritmo de la música que tanto les gustaba. A medida que pasaba el tiempo, Yeri Mua y Cry se hicieron amigos inseparables. Juntos crearon videos aún más asombrosos y lograron inspirar a otros con su alegría contagiosa.
Y así fue como la valentía y determinación de Yeri Mua le permitieron acercarse al chico que le gustaba y convertirse en grandes amigos.
Aprendieron la importancia de ser auténticos con uno mismo, perseguir sus sueños e inspirar a los demás con su creatividad. Desde entonces, Yeri continuó siendo una tiktoker famosa mientras seguía compartiendo su amor por el baile y la diversión con todos aquellos dispuestos a disfrutarlo.
Y así concluye esta historia llena de amistad, valentía y perseverancia. Nos enseña que nunca debemos rendirnos y siempre debemos seguir nuestros sueños, sin importar los obstáculos que se presenten en el camino.
FIN.