Barbarito se pierde en la ciudad de Victoria

Una familia de lagartijas formada por Bárbara (mamá), Bárbaro (papá), Barbarita (hija mayor) y Barbarito (hijo menor) decidió hacer un paseo a la ciudad de Victoria.

Mientras Barbarita jugaba en el tobogán de la plaza mayor, sus padres la miraban atentamente, pero Barbarito, el pequeño de la familia, se separó sin que nadie se diera cuenta. Al percatarse de su ausencia, Bárbara y Bárbaro comenzaron a buscarlo desesperadamente, preguntando a otros animales y recorriendo cada rincón de la ciudad.

Mientras tanto, Barbarito, asustado y confundido, intentaba recordar el camino de regreso a la plaza mayor. En su búsqueda, tuvo que superar varios desafíos y enfrentarse a sus miedos, pero finalmente logró orientarse y encontrar el camino de vuelta.

A su llegada, su familia lo abrazó con alegría, demostrándole lo preocupados que estaban, y desde ese día aprendieron que, aunque a veces se separen, siempre podrán encontrarse si mantienen la calma y confían en sí mismos y en el amor de su familia.