Cartas de amor vecinas

Camilo y Milena vivían en casas contiguas, pero nunca hablaban. Se veían todos los días en el colegio y se miraban con cariño, pero no se animaban a decirse nada. Parecía que un muro invisible los separaba.

Un día, Camilo decidió que tenía que hacer algo para acercarse a Milena. Así que pensó en una idea: le escribiría una carta de amor. Pero no sabía cómo entregarla sin sentir vergüenza.

Al día siguiente, mientras caminaba hacia el colegio, vio a Milena sentada en la plaza del barrio, leyendo un libro. Se armó de valor y se acercó a ella. - Hola Milena -dijo tímidamente-.

¿Puedo sentarme? Milena asintió con la cabeza y Camilo se sentó a su lado. - Quería hablarte sobre algo importante -dijo Camilo nervioso-. He estado pensando mucho en ti últimamente... Milena lo interrumpió:- Yo también he estado pensando mucho en ti -confesó sonriendo tímidamente-.

Camilo tomó aire y sacó la carta de amor del bolsillo. La entregó temblando a Milena, quien la recibió con sorpresa. - Es para ti -dijo Camilo con voz baja-. Espero que te guste... Milena abrió la carta y comenzó a leerla.

Era una hermosa declaración de amor escrita con todo el corazón por Camilo. Al terminar de leerla, levantó la vista hacia él y le sonrió emocionada.

- Me encanta -dijo Milena-, es lo más bonito que alguien me ha escrito. - Me alegro de que te guste -respondió Camilo con una sonrisa tímida-. A partir de ese día, Camilo y Milena comenzaron a hablar más seguido. Descubrieron que tenían muchas cosas en común y se hacían reír mutuamente.

Compartieron momentos inolvidables juntos y se convirtieron en los mejores amigos. Pero la historia no termina ahí.

Un día, mientras paseaban por el parque, Camilo tomó las manos de Milena y le dijo:- Quiero que sepas que te amo desde hace mucho tiempo... ¿Quieres ser mi novia? Milena lo miró a los ojos y respondió emocionada:- Sí, Camilo, quiero ser tu novia... Desde entonces, Camilo y Milena fueron inseparables.

Se amaban con todo el corazón y disfrutaban cada momento juntos. Habían aprendido que el amor es más fuerte que cualquier muro invisible que pueda separarlos.