Cayu, el niño aventurero

En una pequeña ciudad de Argentina vivía un niño llamado Cayu, que siempre llevaba una pantaloneta azul y una playera amarilla. Cayu era un niño muy curioso y aventurero, siempre buscando nuevas experiencias y aprendiendo cosas nuevas.

Un día, Cayu decidió explorar el bosque que estaba detrás de su casa. Al principio, se sentía un poco asustado, pero cuando vio todas las maravillas que el bosque tenía para ofrecer, su miedo desapareció.

Cayu descubrió plantas interesantes, vio ardillas correteando por los árboles y escuchó el canto de pájaros exóticos. "¡Qué lugar tan maravilloso!", exclamó Cayu emocionado. Pero mientras exploraba, Cayu se perdió. A pesar de su valentía, comenzó a sentir un poco de miedo. "¿Qué hago ahora?", se preguntó.

Entonces recordó lo que su madre le había enseñado: siempre llevar consigo un silbato en caso de perderse. Cayu sopló el silbato con todas sus fuerzas, y al poco tiempo escuchó a lo lejos la voz de su madre llamándolo.

"¡Cayu, Cayu, aquí estoy!", gritó su madre. Siguiendo el sonido, finalmente regresó a casa donde su madre lo abrazó con fuerza. Cayu aprendió una valiosa lección: explorar es maravilloso, pero es importante estar preparado y pedir ayuda cuando la necesitas.

A partir de ese día, Cayu se convirtió en un experto explorador, siempre listo y con su silbato a mano.