Cleopatra y el desborde del río Nilo

Había una vez, en las cercanías del majestuoso río Nilo, una niña llamada Cleopatra. Ella vivía en una humilde casa junto a su familia, quienes se dedicaban a cuidar la tierra y cultivar alimentos.

Cleopatra amaba jugar en las orillas del río y observar los barcos pasar. Un día, mientras ayudaba a su madre a recoger frutas, escucharon un estruendo. El río Nilo estaba desbordándose y se acercaba rápidamente a su hogar.

-¡Mamá, el río se está saliendo de su cauce! -exclamó Cleopatra alarmada. Sin perder tiempo, la familia de Cleopatra comenzó a movilizarse para proteger su hogar y salvaguardar sus vidas. Juntos, construyeron barricadas usando sacos de arena y maderas para contener el avance del agua.

-¡Tenemos que trabajar juntos para mantenernos a salvo! -dijo el padre de Cleopatra, infundiendo ánimo en todos. A pesar del miedo y la incertidumbre, Cleopatra y su familia no se rindieron. Durante días, lucharon contra la fuerza del río y se apoyaron mutuamente.

Finalmente, el río Nilo comenzó a retroceder, dejando a su paso daños y destrucción. Aunque su casa estaba afectada, todos estaban a salvo.

Cleopatra y su familia aprendieron sobre la importancia de la unidad, la resistencia y la solidaridad en tiempos difíciles. A medida que reconstruían su hogar y ayudaban a sus vecinos, comprendieron que juntos podían superar cualquier desafío.

Y así, la valentía de Cleopatra y su familia se convirtió en un ejemplo de esperanza y fortaleza para toda la comunidad.