Coni y su valiente aprendizaje
Había una vez una niña llamada Coni, a quien le encantaba aprender y descubrir cosas nuevas. Siempre estaba ansiosa por ir a la escuela y participar en todas las actividades.
Pero había algo que le preocupaba mucho: los exámenes. Coni se ponía muy nerviosa cada vez que tenía que rendir un examen, tanto así que su mente se bloqueaba y no podía recordar nada de lo que había estudiado.
Esto la frustraba mucho, ya que era una excelente estudiante en todas las demás áreas. Un día, antes de un importante examen de matemáticas, Coni decidió buscar ayuda para superar sus miedos. Le contó a su mamá sobre su problema y juntas idearon un plan.
—"Coni" , dijo su mamá con ternura, "sé que te pones muy nerviosa cuando tienes que rendir un examen, pero recuerda que el conocimiento está dentro tuyo. No te preocupes tanto por el resultado final y concéntrate en hacer tu mejor esfuerzo".
Con estas palabras en mente, Coni se preparó para el examen. Estudió todas las fórmulas y resolvió muchos ejercicios prácticos. Además, practicó técnicas de relajación para controlar sus nervios.
El día del examen llegó y Coni estaba decidida a dar lo mejor de sí misma. Cuando recibió la hoja de preguntas, respiró profundamente y comenzó a resolver cada ejercicio con calma y confianza.
Pero justo cuando pensaba haber terminado el examen, ocurrió algo inesperado: ¡se fue la luz! La sala quedó sumida en la oscuridad total. Todos los demás estudiantes se pusieron nerviosos y empezaron a murmurar, pero Coni recordó las palabras de su mamá y decidió no dejarse afectar.
Tomó su lápiz y siguió resolviendo los ejercicios en su mente. "¡Coni, qué estás haciendo?", preguntó la maestra sorprendida al verla tan tranquila en medio de la oscuridad. "Estoy terminando mi examen", respondió Coni sonriendo. La maestra no podía creer lo que veía.
Aunque no había luz, Coni había demostrado un gran conocimiento y habilidad para resolver los problemas matemáticos sin necesidad de escribir nada. Cuando finalmente volvió la luz, todos quedaron asombrados al ver el examen impecablemente resuelto de Coni.
La maestra le dio una calificación perfecta y le dijo:"Coni, has demostrado una valentía increíble al enfrentar esta situación inesperada. No solo tienes un amplio conocimiento en matemáticas, sino que también has demostrado una gran capacidad para controlar tus emociones".
A partir de ese día, Coni dejó atrás sus miedos a los exámenes. Se dio cuenta de que lo más importante era tener confianza en sí misma y disfrutar del proceso de aprendizaje.
Desde entonces, cada vez que tenía un examen por delante, recordaba la historia del apagón y sabía que podía superar cualquier obstáculo con determinación y calma. Y así, Coni se convirtió en una inspiración para todos sus compañeros de clase.
Aprendieron juntos a enfrentar los desafíos con valentía y a disfrutar cada paso del camino hacia el conocimiento.
FIN.