Correr antes del Amanecer

Martín era un joven muy entusiasta y deportista. Todas las mañanas, antes de que saliera el sol, se levantaba temprano para correr.

Un día, su despertador sonó a las 5 de la mañana, y Martín, con determination, apagó el despertador de un salto. Se puso sus zapatillas, su ropa deportiva y salió a la calle. El cielo todavía estaba oscuro y las estrellas brillaban como diamantes en el firmamento. Martín respiró hondo y empezó a correr.

Mientras corría, escuchó el canto de los pájaros que despertaban y sintió la frescura del aire en su rostro. Era maravilloso. Pero de repente, tropezó con una piedra y cayó al suelo.

Sin embargo, en lugar de rendirse, se levantó, se sacudió el polvo y decidió seguir corriendo. A medida que el sol comenzaba a aparecer en el horizonte, Martín sintió una energía renovada. Sabía que había superado un desafío y se sentía orgulloso de sí mismo.

Desde ese día, cada vez que se enfrentaba a un obstáculo, recordaba la mañana en la que corrió antes del amanecer y superó la caída. Martín aprendió que la determinación y la actitud positiva pueden ayudarlo a superar cualquier dificultad.