Dante aprende a dormir


Había una vez un niño llamado Dante, al que no le gustaba dormir. Cada noche, cuando llegaba la hora de irse a la cama, se ponía muy nervioso y empezaba a llorar.

Su mamá, preocupada por su salud y bienestar, intentó todo lo posible para hacerle entender lo importante que era descansar. Pero nada parecía funcionar. "Dante, mi amor, es hora de dormir", decía su mamá con dulzura cada noche.

"No quiero dormir", respondía Dante con lágrimas en los ojos. Así pasaban las noches. Dante estaba siempre cansado durante el día y sus maestros se preocupaban por él en la escuela.

Un día, mientras jugaba en el parque con sus amigos, tuvo un accidente y se lastimó una pierna. La lesión fue grave y tuvo que quedarse en casa sin poder moverse mucho durante varias semanas. Al principio estaba triste porque no podía jugar como antes.

Pero luego comenzó a darse cuenta de algo: mientras más descansaba su cuerpo, menos dolor sentía en su pierna herida. "Mamá -dijo Dante-, ¿por qué mi pierna duele menos cuando descanso?""Porque así es como funciona nuestro cuerpo", explicó ella.

"Cuando lo dejamos descansar adecuadamente nos ayuda a sanarnos más rápido". Dante pensó sobre esto durante varios días hasta que finalmente entendió algo importante: si quería estar sano y fuerte necesitaba dormir bien todas las noches. A partir de ese momento comenzó a cambiar sus hábitos nocturnos.

Empezó a leer cuentos antes de irse a la cama, a tomar una taza de leche caliente y a acostarse temprano. Poco a poco, Dante comenzó a sentirse más descansado durante el día.

Ya no se quedaba dormido en la escuela y podía jugar con sus amigos sin cansarse tanto. "Mamá -dijo Dante un día-, gracias por ayudarme a entender lo importante que es dormir bien. Ahora me siento mucho mejor".

"De nada mi amor", respondió su mamá con una sonrisa. "Siempre estaré aquí para ayudarte". Desde ese día, Dante se convirtió en un niño feliz y saludable que sabía lo importante que era cuidar su cuerpo y mente.

Y así, cada noche se iba felizmente a la cama sabiendo que al dormir estaba haciendo algo bueno para sí mismo.

Dirección del Cuentito copiada!