Dante, el dragón de las rimas y el tesoro de la amistad

Había una vez un pequeño pueblo llamado Villa Encantada, donde vivían seres mágicos de todo tipo. Entre ellos, se encontraba un dragón muy especial llamado Dante.

A diferencia de los demás dragones, Dante tenía la habilidad de hablar en rimas. Dante era amigable y siempre estaba dispuesto a ayudar a los habitantes del pueblo con sus problemas. Sin embargo, había algo que lo entristecía: nadie parecía entender su forma de comunicarse.

La gente le decía que sus palabras eran confusas y difíciles de entender. Un día, mientras volaba por el bosque cercano al pueblo, Dante escuchó un llanto desesperado proveniente de una cueva oculta entre los árboles.

Al acercarse, descubrió a un pequeño duendecillo llamado Lucas atrapado entre las ramas de un árbol caído. "¡Ayuda! ¡Por favor ayuda!"- gritó Lucas mientras luchaba por liberarse. Dante se acercó rápidamente y sopló fuego sobre las ramas secas hasta que se convirtieron en cenizas.

Lucas quedó libre y cayó al suelo exhausto pero ileso. "¡Muchas gracias! ¡Eres increíble!"- exclamó Lucas emocionado. Dante sonrió y respondió:"No hay problema, amigo mío. Para eso estoy aquí,para ayudar siemprecon mi fuego sin fin.

"Lucas miró asombrado al dragón y dijo:"¡Tú hablas en rimas! Es algo realmente genial. Podrías enseñarmea hacerlo igual?"Dante asintió emocionado ante la propuesta de Lucas.

A partir de ese día, los dos se convirtieron en grandes amigos y pasaban horas juntos practicando rimas y compartiendo aventuras. Un día, mientras exploraban una cueva misteriosa, Dante y Lucas encontraron un antiguo libro que hablaba sobre un tesoro escondido en lo más profundo del bosque.

Decidieron embarcarse en la búsqueda del tesoro, emocionados por la posibilidad de descubrir algo valioso. A medida que avanzaban por el bosque, enfrentaron desafíos y obstáculos. Pero gracias a las habilidades de Dante para hablar en rimas, encontraron soluciones creativas y lograron superar cada prueba con éxito.

Finalmente, llegaron al lugar indicado por el libro y descubrieron un cofre brillante lleno de monedas doradas. Lucas estaba extasiado ante tal hallazgo, pero antes de tomar alguna moneda, Dante dijo:"El verdadero tesoro, no está en este cofre.

Lo importante son las amistadesy los momentos que vivimos juntos. "Lucas reflexionó sobre las palabras del dragón y comprendió que el verdadero valor no estaba en el dinero sino en las experiencias compartidas con sus seres queridos.

Desde aquel día, Dante continuó ayudando a los habitantes de Villa Encantada con sus rimas divertidas e inspiradoras. Y gracias a su amistad con Lucas, nunca volvió a sentirse solo ni incomprendido. Así termina esta historia, con moraleja incluida. Valora tus amistades, por siempre estarán contigo.