Defensores del mar



Joako y Juli eran dos hermanos a los que les encantaba el mar. Desde pequeños, sus padres los llevaban a la playa cada verano y allí se divertían construyendo castillos de arena, nadando en el mar y jugando con las olas.

Un día, mientras caminaban por la orilla del mar, Juli encontró un caracol herido en la arena. Se lo mostró a Joako y juntos decidieron llevarlo a casa para curarlo. "¿Qué podemos hacer para que se cure?" -preguntó Joako.

"Podemos ponerlo en una pecera con agua limpia y darle algunas hojas de lechuga", sugirió Juli. Así lo hicieron y cuidaron al caracol con mucho amor. Poco a poco fue sanando hasta que finalmente pudo volver al mar.

Los niños quedaron muy felices de haber ayudado a un ser vivo. A partir de ese momento, Joako y Juli comenzaron a interesarse más por los animales que vivían en el mar. Leían libros sobre ellos e investigaban en internet para aprender más.

Descubrieron que muchos animales estaban siendo afectados por la contaminación del agua y decidieron hacer algo al respecto. "Podemos organizar una limpieza de playa", propuso Joako.

Así fue como convocaron a sus amigos del colegio y juntos recolectaron basura de la playa durante todo un fin de semana. Fue una tarea ardua pero muy gratificante porque sabían que estaban haciendo algo bueno por el medio ambiente. Pero no todo fue fácil para estos dos hermanos amantes del mar.

Un día, mientras navegaban en kayak cerca de la costa, se toparon con unos pescadores ilegales que estaban capturando especies protegidas.

Los niños intentaron convencerlos de que lo que estaban haciendo era malo, pero los pescadores se burlaron de ellos y siguieron con su actividad. Joako y Juli no se quedaron de brazos cruzados. Denunciaron la situación a las autoridades y gracias a su valentía, los pescadores fueron detenidos y las especies protegidas pudieron ser liberadas.

A partir de ese momento, Joako y Juli se convirtieron en defensores del mar. No solo aprendían sobre él sino que también luchaban por preservarlo. Su amor por el mar había crecido aún más gracias a todas estas experiencias.

Y así termina nuestra historia infantil inspiradora y educacional en donde dos hermanos descubren el amor por el mar y deciden cuidarlo con todas sus fuerzas.

FIN.

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