El abrazo mágico de Peluche

Había una vez en el bosque Encantado un osito muy especial llamado Peluche, que tenía el poder de dar abrazos mágicos.

Cada vez que alguien triste o preocupado se cruzaba en su camino, Peluche lo abrazaba con tanto cariño y ternura que todas sus preocupaciones desaparecían al instante. Un día, Peluche se encontró con Lucas, un conejito muy inquieto que no paraba de correr de un lado a otro sin prestar atención a nada.

"Hola Lucas, ¿qué te pasa? Pareces muy agitado", dijo Peluche con voz suave y amigable. "Estoy nervioso porque mañana tengo un examen importante en la escuela y siento que no estoy preparado", respondió Lucas con cara de preocupación.

Peluche lo miró tiernamente y le dio un abrazo tan reconfortante que Lucas sintió como si todo su miedo se desvaneciera. "No te preocupes, amigo. Estoy seguro de que si estudias y te esfuerzas, vas a salir adelante en tu examen.

Además, siempre puedes contar conmigo para darte ánimo cuando lo necesites", dijo Peluche con una sonrisa. Lucas se sintió tan agradecido por el gesto de Peluche que decidió seguir su consejo y dedicarse a estudiar para el examen.

Pasó toda la tarde repasando sus lecciones y practicando problemas matemáticos hasta sentirse seguro de sí mismo. Al día siguiente, llegó el momento del examen y Lucas lo enfrentó con valentía y determinación.

A medida que iba resolviendo las preguntas, recordaba las palabras de aliento de Peluche y se sentía cada vez más confiado en sus capacidades. Finalmente, cuando recibió la nota del examen, descubrió con alegría que había obtenido la mejor calificación de toda la clase.

Corrió emocionado hacia el bosque Encantado para contarle la noticia a Peluche. "¡Peluche! ¡Peluche! ¡Saqué diez en mi examen gracias a tu apoyo y tus abrazos mágicos!", exclamó Lucas emocionado mientras abrazaba al osito con fuerza.

Peluche sonrió orgulloso al ver lo feliz que estaba su amigo y le dijo: "¡Felicidades, Lucas! Siempre recuerda que puedes lograr cualquier cosa si crees en ti mismo y trabajas duro. Y nunca olvides que aquí estaré yo para darte todo mi cariño cuando lo necesites".

Desde ese día, Lucas siguió visitando al osito Peluche en el bosque Encantado cada vez que necesitaba ánimo o consuelo. Y juntos vivieron muchas aventuras maravillosas llenas de amor, amistad y abrazos mágicos.