El abuelo artesano y el bombo alegre
En un pequeño pueblo de Argentina vivía un niño llamado Mateo, a quien le apasionaba la música y la artesanía. Su abuelo, Don Tito, era un hábil artesano y músico, conocido por su habilidad para construir instrumentos tradicionales.
Un día, Mateo le pidió a su abuelo que le enseñara a hacer un bonito bombo y una maraca bien alegre. Don Tito, emocionado por compartir su conocimiento, aceptó encantado la propuesta y juntos se dispusieron a realizar esta emocionante aventura.
"Abuelo, ¿cómo se hace un bombo?", preguntó Mateo con entusiasmo. "Primero necesitamos un buen aro de madera para la base", explicó Don Tito con paciencia mientras mostraba a Mateo los pasos y herramientas necesarias.
Con el paso de los días, juntos cortaron la madera, la ensamblaron y estiraron la piel con cuidado, hasta que el bombo tomó forma. Luego, llegó el turno de la maraca.
Don Tito y Mateo recolectaron las mejores calabazas, semillas y pinturas para decorarla con colores vibrantes. Al finalizar cada instrumento, se escuchaba el sonido alegre del bombo y la maraca, llenando el taller con una melodía contagiosa.
Mateo aprendió no solo a hacer instrumentos, sino el valor de la paciencia, el trabajo en equipo y la importancia de mantener vivas las tradiciones. Finalmente, en el festival anual del pueblo, Mateo y Don Tito se presentaron con orgullo ante todos, tocando juntos el bombo y la maraca que habían creado.
La gente del pueblo quedó maravillada al ver la destreza y la alegría con la que interpretaron la música tradicional. Desde entonces, Mateo y su abuelo compartieron su pasión por la música y la artesanía, inspirando a otros a seguir sus pasos.
FIN.