El amor en Arcoíris



Había una vez en un pequeño pueblo llamado Arcoíris, una niña llamada Lola. Lola era una niña alegre, curiosa y muy traviesa.

Le encantaba jugar con sus amigos en el parque, correr por los campos y subirse a los árboles más altos. Un día, llegó una nueva niña al pueblo llamada Valentina. Desde el primer momento que la vio, Lola sintió algo diferente en su corazón.

No entendía qué le pasaba, pero cada vez que veía a Valentina, su corazón latía más rápido y sentía mariposas en el estómago. Lola se confundía con esos sentimientos nuevos que experimentaba. Habló con su mejor amiga Martina sobre lo que estaba sintiendo.

"Martina, ¿te ha pasado alguna vez sentir algo extraño por alguien?" preguntó Lola. "¿A qué te refieres, Lola? ¿Algo así como cuando te gusta mucho un helado de chocolate?" respondió Martina riendo. Lola suspiró y le explicó lo que realmente sentía por Valentina.

Martina la escuchó atentamente y le dijo: "Lola, creo que lo que sientes es algo hermoso. Puede ser amor". Lola se quedó pensativa tratando de entenderlo todo. Decidió acercarse a Valentina para conocerla mejor y compartir tiempo juntas.

Descubrió que tenían muchos gustos similares: les encantaba dibujar, leer cuentos de hadas y explorar el pueblo en busca de aventuras. Con el paso del tiempo, la amistad entre Lola y Valentina creció cada día más fuerte.

Se divertían juntas jugando en el parque, haciendo castillos de arena en la playa y contándose secretos al oído bajo las estrellas.

Un día, mientras paseaban por el bosque encantado cerca del pueblo, Valentina tomó la mano de Lola suavemente y le dijo: "Lola, desde que llegué al pueblo sentí algo especial contigo. Eres como mi arcoíris en días grises". El corazón de Lola dio un vuelco de alegría al escuchar esas palabras tan sinceras de Valentina.

Entendió entonces todo lo que había estado sintiendo: estaba enamorada de su amiga. "Valentina... yo también siento algo muy bonito por ti", confesó Lola sonriendo tímidamente.

Desde ese día, Lola y Valentina compartieron no solo una linda amistad sino también un amor lleno de colores brillantes como un arcoíris. Juntas aprendieron a aceptarse tal como eran y a valorar la importancia del cariño sincero entre dos personas.

Y así fue cómo la historia de la niña que se sentía atraída por otra niña pero no sabía lo que le pasaba terminó siendo un cuento lleno de amor verdadero en el bello pueblo de Arcoíris donde todo era posible si se vivía con amor y respeto hacia uno mismo y hacia los demás.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!