El amor en Villa Felicidad

En un pequeño pueblo llamado Villa Felicidad, vivía un perro muy especial llamado Cuento. Cuento era un perro inteligente y cariñoso que siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás.

Un día, mientras paseaba por el parque del pueblo, se encontró con Abdón, un gato callejero muy simpático, y Nelia, una hermosa mariposa de colores brillantes.

Cuento se acercó a Abdón y Nelia con curiosidad y les preguntó:- ¿Qué están haciendo por aquí? Abdón respondió con una sonrisa traviesa:- Estamos en la etapa de enamoramiento, Cuento. Nelia y yo nos hemos conocido recientemente y estamos descubriendo lo maravilloso que es estar juntos. Nelia revoloteaba alrededor de Abdón con timidez, pero su mirada reflejaba alegría y emoción.

Cuento los observaba atentamente y sintió una cálida sensación en su corazón al verlos tan felices. - ¡Eso es maravilloso! -exclamó Cuento-. El amor es uno de los sentimientos más poderosos que existen.

Disfruten cada momento juntos y hagan que esta etapa sea inolvidable. Abdón asintió con entusiasmo mientras acariciaba suavemente las alas de Nelia. - Gracias, Cuento. Prometemos aprovechar al máximo este tiempo tan especial -dijo Abdón con gratitud en sus ojos.

Los días pasaron y Abdón y Nelia seguían disfrutando de su enamoramiento en Villa Felicidad. Se paseaban por el parque tomados de la pata (y la antena) mientras compartían risas y secretos.

Cuento los acompañaba a veces, brindándoles consejos sabios sobre el amor y la importancia de cuidarse mutuamente. Sin embargo, una tarde nublada, cuando Abdón y Nelia estaban a punto de darse un beso bajo un árbol frondoso, apareció Óscar, el zorro astuto del pueblo.

Óscar siempre había estado celoso del amor entre Abdón y Nelia porque anhelaba la atención de la colorida mariposa para él solo. - ¡Ahí están ustedes dos! -gritó Óscar con malicia-. Creí que podía robarles su felicidad para siempre.

Abdón protegió a Nelia instintivamente mientras miraba desafiante al zorro intruso. - No permitiremos que arruines nuestro amor -declaró firmemente Abdón-. Nuestra conexión es fuerte e indestructible. Cuento se interpuso entre Óscar y la pareja enamorada, dispuesto a defenderlos con valentía.

- El verdadero amor siempre vence a la envidia y al egoísmo -afirmó Cuento con determinación-. Ustedes dos están destinados a estar juntos si realmente se aman sinceramente. Óscar gruñó frustrado ante las palabras sabias de Cuento.

Finalmente comprendió que no podía separar a dos seres que se amaban profundamente. Con resignación, se dio media vuelta y desapareció entre los árboles sin decir una palabra más.

Abdón abrazó emocionado a Nelia mientras le dedicaba una tierna sonrisa llena de complicidad. - Gracias por estar siempre ahí para nosotros, querido amigo. - dijo emocionado. Cuento movió felizmente su cola como gesto afirmativo.

Y así continuaron disfrutando del dulce sentimiento del enamoramiento bajo el sol radiante de Villa Felicidad donde reinaban el amor sincero, la amistad verdadera junto momentos inolvidables.