El amor entre arquitectos

Vero y Pablo se conocieron en la universidad, cuando ambos estaban estudiando para ser arquitectos. Desde el primer día, hubo una chispa entre ellos que no pudieron ignorar.

Después de graduarse, comenzaron a trabajar juntos en un estudio de arquitectura y rápidamente se convirtieron en socios. Un día, después de trabajar hasta tarde en un proyecto muy importante, Vero y Pablo se dieron cuenta de que sentían algo más que amistad el uno por el otro.

Decidieron darle una oportunidad al amor y comenzaron a salir. Después de unos años juntos, Vero y Pablo decidieron tener hijos. Fueron bendecidos con dos hermosos hijos: Bauti y Rufina. La familia estaba completa.

Un día, mientras jugaban en el parque, Bauti encontró un pequeño pájaro herido. El niño inmediatamente corrió hacia su mamá para pedir ayuda. "Mamá, mamá! Encontré un pajarito lastimado ¿Podemos ayudarlo?"- preguntó emocionado Bauti.

"Por supuesto mi amor"- respondió Vero"Vamos a llevarlo a casa para cuidarlo". La familia trabajó junta para curar al pajarito herido y lo alimentaron con semillas y agua fresca todos los días. Con el tiempo, el pequeño pájaro sanó completamente gracias al amoroso cuidado de la familia.

"¡Miren! ¡El pajarito está volando!"- exclamó Rufina emocionada cuando vio al ave tomar vuelo por primera vez desde su jaula temporal.

Los niños aprendieron sobre la importancia del cuidado hacia los animales y la naturaleza a través de esta experiencia. Vero y Pablo se sintieron orgullosos de sus hijos por su compasión y empatía hacia los seres vivos. Un día, mientras cenaban juntos en casa, Pablo tuvo una idea sorprendente. "¿Qué tal si nos casamos?"- preguntó emocionado.

La familia entera se llenó de alegría al escuchar las noticias. Los niños comenzaron a hacer planes para el gran día, mientras que Vero y Pablo comenzaron a organizar todo lo necesario para hacer realidad su sueño de matrimonio.

El gran día finalmente llegó y la familia estaba llena de felicidad. La ceremonia fue hermosa, con todos los amigos cercanos y familiares presentes para celebrar el amor entre Vero y Pablo.

Después del matrimonio, la familia continuó creciendo junta con amor y compasión por todos aquellos que les rodeaban. Aprendieron que el cuidado, la empatía y el amor son valores importantes en cualquier relación humana. Y así fueron felices para siempre: Vero, Pablo, Bauti, Rufina...

¡y todos los animalitos que encontraran en su camino!