El amor infinito
Había una vez en la ciudad de Buenos Aires, en un barrio colorido y alegre, una niña llamada Valentina. Valentina era una niña curiosa y amable, siempre dispuesta a ayudar a los demás.
Un día, mientras paseaba por el parque, Valentina se encontró con un hada mágica llamada Estrellita. Estrellita le dijo a Valentina que tenía un regalo muy especial para ella.
La hada le entregó a Valentina un pequeño corazón brillante y le dijo: "Este es el corazón del amor infinito. Con él, podrás hacer felices a todas las personas que encuentres en tu camino". Valentina, emocionada, agradeció a Estrellita y se dispuso a llevar el corazón del amor infinito a su casa.
Desde ese día, Valentina llevaba consigo el corazón mágico a donde quiera que iba.
Un día, mientras estaba en la escuela, Valentina se encontró con Juancito, un niño que siempre estaba solo y triste. Valentina decidió acercarse a él y mostrarle el corazón del amor infinito.
Al ver el destello del corazón, Juancito sonrió por primera vez en mucho tiempo. A partir de ese día, Valentina y Juancito se convirtieron en grandes amigos.
Juntos, compartían el amor infinito con todos en el colegio, haciendo que la alegría y la amistad florecieran en cada rincón. Pero un día, el corazón del amor infinito desapareció misteriosamente. Valentina y Juancito, preocupados, emprendieron un viaje en busca del corazón mágico.
Recorrieron la ciudad, enfrentaron desafíos y superaron obstáculos, demostrando que el amor verdadero siempre está presente en los corazones generosos. Finalmente, encontraron el corazón del amor infinito en el lugar más inesperado: en el corazón mismo de cada persona que habían ayudado y con quienes habían compartido su amor.
Aprendieron que el amor infinito no es un objeto que se pueda perder, sino que reside en las acciones cariñosas y en la bondad que se comparte con los demás.
Valentina y Juancito regresaron a su casa con los corazones llenos de alegría, sabiendo que el amor infinito siempre estaría con ellos, guiándolos en su camino de ayudar y hacer felices a los demás.
FIN.