El amor por el té
Vivi era una bichita color rojo muy especial. Le encantaba volar entre las flores, pero lo que más disfrutaba era tomar una taza de té para dormir plácidamente.
No le gustaba el café porque le quitaba el sueño, así que el té era su pasión. Un día, mientras disfrutaba de su té de jazmín, conoció a Alex, un pajarito amarillo muy alegre.
- Hola, soy Vivi, ¿te gustaría unirse a mí para tomar té? - le preguntó Vivi, extendiendo una invitación con su ala. - ¡Hola, soy Alex! ¡Me encantaría tomar té contigo! - respondió emocionado el pajarito. Desde ese día, Vivi y Alex se volvieron inseparables, compartiendo tardes de té y largas conversaciones.
Descubrieron que tenían muchas cosas en común, sobre todo su amor por el té. Con el tiempo, ese cariño mutuo se convirtió en un sentimiento muy especial.
Se enamoraron, y juntos siguieron disfrutando su mutuo amor por el té, volando juntos hacia hermosas puestas de sol y descubriendo nuevos sabores de infusiones. Aprendieron que las diferencias no importan cuando el cariño es sincero, y que el amor por las cosas simples de la vida puede unir a dos seres de distinta naturaleza en una hermosa amistad.
FIN.