El amor que atrajo a los pájaros


En un pintoresco pueblo del campo argentino, vivía la dulce Abuela Campo. Todos los días, se levantaba temprano, preparaba un delicioso café y salía al jardín a cuidar de sus plantas y flores. La abuela tenía un don especial: su amor por la naturaleza atraía a los pájaros más hermosos, que revoloteaban a su alrededor mientras ella cantaba canciones antiguas.

Un día, un grupo de niños curiosos se acercó a la abuela. -Hola, abuela Campo. ¿Cómo haces para que los pájaros siempre estén contigo? -preguntó la pequeña Ana. La abuela sonrió y les contó su secreto. -Es simple, queridos. Todo es cuestión de amor y paciencia. Les doy alimento, cuido de sus nidos y les hablo con cariño. Además, siembran plantas que atraen a los pájaros, como girasoles, albahaca y lavanda.

Los niños se sorprendieron y decidieron ayudar a la abuela a cuidar del jardín. Juntos sembraron nuevas plantas, construyeron bebederos y nidos para los pájaros, y aprendieron a cantar dulces melodías para atraerlos. Pronto, el jardín de la abuela se convirtió en el lugar favorito de todas las aves del pueblo.

Una mañana, una tormenta azotó el pueblo. Los vientos fuertes y la lluvia amenazaban con destruir el precioso jardín de la abuela. Los niños, preocupados, corrieron a su casa y la encontraron afuera, protegiendo a las aves con sus brazos y cantándoles canciones de tranquilidad. El amor de la abuela por la naturaleza era tan poderoso que las aves se sentían seguras a su lado.

Finalmente, la tormenta pasó, y el jardín de la abuela seguía radiante y lleno de vida. Los pájaros revoloteaban alegremente, y los niños comprendieron que el amor y la paciencia de la abuela habían sido clave para proteger a las aves. A partir de ese día, prometieron seguir cuidando del jardín y de todos los seres que lo habitaban, con la misma dedicación y amor que la abuela Campo.

Y así, el secreto de la abuela Campo se convirtió en una lección de vida para todos los habitantes del pueblo, que aprendieron a valorar y proteger la belleza de la naturaleza.

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