El animal del arcoiris



Había una vez en el bosque encantado un animal muy especial, conocido como el animal del arcoiris.

Este misterioso ser era el guardián de la magia y la alegría en el bosque, ya que su pelaje cambiaba de color según su estado de ánimo. Un día, el animal del arcoiris despertó para encontrar que su pelaje había perdido todos sus colores, dejando al bosque sin la alegría y la magia que tanto necesitaba.

Intrigado por lo que pudo haber causado esto, decidió emprender un viaje en búsqueda de respuestas y una solución. En su travesía, conoció a distintos animales del bosque que le ofrecieron su ayuda, pero ninguno parecía tener la respuesta que buscaba. -Hola, animal del arcoiris.

¿Por qué estás tan triste? - preguntó el conejo saltarín. -He perdido mis colores y no sé cómo recuperarlos. El bosque entero depende de mí para estar lleno de alegría y magia- respondió el animal del arcoiris con tristeza.

El búho sabio le aconsejó que consultara a la hada de las estaciones, una mágica criatura que vivía en lo más profundo del bosque.

Siguiendo el consejo del búho sabio, el animal del arcoiris se adentró en el denso bosque hasta encontrar la morada de la hada de las estaciones. La hada, con su sabiduría ancestral, le explicó que la única forma de recuperar sus colores era esparciendo alegría y amor por todo el bosque.

El animal del arcoiris entendió que su tristeza había afectado la magia que había en su interior, y que solo a través de gestos amorosos y la felicidad de los demás podría recuperar su brillo.

Decidido a seguir el consejo de la hada, el animal del arcoiris regresó al bosque y se dedicó a ayudar a cada criatura con sus problemas, compartiendo su alegría y bondad. Conforme pasaba el tiempo, sus colores volvieron a brillar, llenando al bosque de la magia y la alegría que tanto necesitaba.

El animal del arcoiris aprendió que el amor y la empatía eran la verdadera fuente de su magia, y que siempre debía compartir su bondad con los demás.

Y así, el bosque encantado volvió a ser un lugar mágico y lleno de color, gracias al animal del arcoiris y su valiosa lección.

FIN.

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