El aprendizaje de Lucas



Lucas era un niño curioso y aventurero que siempre estaba buscando cosas nuevas para descubrir. Un día, su papá le permitió acompañarlo a su trabajo en la fábrica de juguetes.

Lucas estaba emocionado por la oportunidad de ver cómo se hacían los juguetes y pasar tiempo con su papá.

Al llegar a la fábrica, su papá le explicó todas las medidas de seguridad que debía tomar en cuenta, como no acercarse a las máquinas en movimiento y no tocar ningún equipo sin permiso. -Presta mucha atención, Lucas. Aquí debemos ser muy cuidadosos -le advirtió su papá. Lucas asintió con seriedad y prometió seguir todas las reglas.

Mientras recorrían la fábrica, Lucas no pudo evitar la emoción al ver tantos juguetes coloridos y escuchar el ruido de las máquinas en funcionamiento. De repente, vio un juguete que se le había caído a un trabajador al lado de una máquina.

Sin pensarlo, Lucas corrió hasta el juguete para recogerlo y devolvérselo al trabajador. En ese momento, sonó una fuerte alarma y todos empezaron a gritar. El papá de Lucas corrió hacia él y lo abrazó con fuerza. -¡Lucas! ¡Estás bien! -exclamó con alivio su papá.

Luego, el jefe de la fábrica explicó que, por suerte, no había pasado a mayores y que la alarma se había activado a tiempo para detener la máquina antes de que Lucas se lastimara.

Todos estaban preocupados por lo sucedido y le recordaron a Lucas la importancia de respetar las reglas de seguridad. A partir de ese momento, Lucas entendió que las reglas existen para proteger a las personas y que es fundamental respetarlas en todo momento.

Aunque pasó un susto, aprendió una lección muy valiosa: la seguridad en el trabajo es responsabilidad de todos y es fundamental seguir las reglas para evitar accidentes.

Desde entonces, Lucas se convirtió en un ejemplo para los demás niños y siempre compartía su experiencia para que todos entendieran la importancia de la seguridad laboral.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!