El árbol maternal
En el hermoso jardín de la abuela Marina, crecía un árbol muy especial llamado el árbol maternal. Este árbol tenía la forma de una madre con sus brazos abiertos, listos para abrazar a quien necesitara amor.
Un día, tres amigos curiosos llamados Martina, Juan y Sofía descubrieron el legendario árbol. Al acercarse, escucharon una suave voz que les dijo: "Soy el árbol maternal, protector y amante de la naturaleza. Estoy aquí para cuidar y enseñarles importantes lecciones de la vida".
Los amigos se sorprendieron, pero estaban emocionados por aprender de esta increíble criatura. El árbol maternal les contó historias maravillosas sobre el valor de la amistad, la importancia de cuidar el medio ambiente y la magia de la paciencia.
Los tres amigos escuchaban maravillados, pues nunca habían conocido a un árbol que hablara. Un día, el jardín de la abuela Marina se vio amenazado por una tormenta feroz.
Los amigos, recordando las enseñanzas del árbol, unieron fuerzas y protegieron cada planta y árbol, incluido el árbol maternal. La tormenta pasó, y el jardín sobrevivió gracias a la valentía y solidaridad de los amigos.
El árbol maternal los abrazó con sus largos brazos y les agradeció por su coraje y amor hacia la naturaleza. A partir de ese día, los tres amigos cuidaron del jardín con más responsabilidad y aprecio, compartiendo las enseñanzas del árbol maternal con todos los que conocían.
FIN.