El arcoíris mágico

Había una vez un grupo de amigos muy especiales: Tormenta, Colores, Estrellas y Primavera. Cada uno de ellos tenía habilidades únicas que los hacían únicos en su propia manera.

Tormenta era un pequeño nube gris que podía hacer llover y tronar cuando estaba emocionado. Colores era un arcoíris mágico que siempre llevaba alegría a dondequiera que iba. Estrellas eran pequeñas luces brillantes en el cielo nocturno, llenas de sabiduría y magia.

Y Primavera era una hermosa flor que florecía con cada cambio de estación. Un día soleado, los cuatro amigos decidieron organizar un picnic en el parque para celebrar la llegada de la primavera.

Cada uno se encargó de traer algo especial para compartir: Tormenta preparó una fresca lluvia para refrescar a todos, Colores trajo frutas coloridas y deliciosas, Estrellas iluminaron el camino con su brillo mágico y Primavera decoró el lugar con sus hermosas flores.

Mientras disfrutaban del picnic juntos, una sorpresa inesperada ocurrió: ¡una tormenta se acercaba rápidamente! El cielo se oscureció y comenzaron a caer gotas pesadas sobre ellos. Todos se apresuraron a buscar refugio bajo los árboles cercanos mientras Tormenta mostraba su poderío.

"¡Ayuda! ¡No queremos arruinar nuestro picnic!" gritó Colores preocupado. Estrellas pensó rápidamente y dijo: "¡Esperen! Si combinamos nuestras habilidades, tal vez podamos convertir esta tormenta en algo maravilloso". Primavera sonrió y dijo: "¡Tienes razón! Si unimos nuestros poderes, podemos hacer que esta tormenta sea mágica".

Así que los cuatro amigos se dieron la mano y cerraron los ojos. Tormenta hizo llover suavemente mientras Colores creaba un arcoíris brillante con sus colores vibrantes. Estrellas comenzó a parpadear en el cielo, iluminando todo a su alrededor.

Y Primavera empezó a florecer aún más, llenando el aire con su fragancia dulce. Pronto, la lluvia se convirtió en una fina llovizna que refrescaba suavemente el ambiente.

El arcoíris brillaba sobre ellos y las estrellas guiaban el camino hacia una mesa llena de deliciosos manjares preparados por Primavera. "¡Wow! ¡Mirá qué hermoso ha quedado nuestro picnic!" exclamó emocionado Colores. "Sí, gracias a nuestra amistad y trabajo en equipo", dijo Estrellas orgulloso.

Mientras disfrutaban de la comida y compartían risas, los amigos se dieron cuenta de lo importante que era trabajar juntos para superar cualquier desafío. Aprendieron que cada uno tenía habilidades únicas pero cuando las combinaban, podían lograr cosas increíbles.

El picnic bajo la tormenta se convirtió en un día inolvidable lleno de magia y alegría. Los amigos decidieron celebrar este día especial todos los años como recordatorio de lo valiosa que era su amistad y del poder del trabajo en equipo.

Y así fue como Tormenta, Colores, Estrellas y Primavera demostraron que incluso en los momentos más difíciles, la amistad y el trabajo en equipo pueden convertir cualquier tormenta en un arcoíris brillante.