El astronauta y las estrellas
Había una vez un astronauta valiente que vivía en la Tierra. Un día, decidió emprender un emocionante viaje al espacio en su reluciente cohete. Su misión era recoger las estrellas más brillantes para llevarlas a la Tierra y hacer algo maravilloso con ellas. El astronauta se despidió de sus amigos y familiares y se adentró en el espacio. Volando entre las estrellas, el astronauta se maravilló con la belleza del universo.
De repente, vio una estrella muy especial, más brillante que todas las demás. Decidió atraparla con mucho cuidado y cariño. La guardó en su nave espacial y continuó buscando más estrellas. Después de recolectar muchas estrellas brillantes, el astronauta regresó a la Tierra con su valiosa carga.
Al aterrizar, el astronauta reunió a todos los niños del mundo y les regaló las estrellas que había recogido. Cada niño recibió una estrella para hacer brillar sus sueños y alegrar sus noches. Desde entonces, todas las noches, las estrellas que el astronauta había repartido iluminaban el cielo, recordándoles a los niños lo especiales y únicos que son. Y el astronauta, feliz por haber hecho sonreír a tantos niños, seguía soñando con nuevas aventuras en el espacio.
FIN.