El autobús mágico de Sofía
Había una vez una chica llamada Sofía. Un día, ella decidió tomar un autobús para ir a visitar a su abuela. Al subir al autobús, notó que el conductor se comportaba de manera extraña.
No hablaba con los pasajeros y parecía estar en otro mundo. Sofía se sentó en uno de los asientos del autobús y comenzó a mirar por la ventana mientras escuchaba música en sus auriculares.
De repente, el conductor le preguntó si quería jugar un crucigrama con él. "¿Quieres jugar un juego de palabras cruzadas conmigo?" - dijo el conductor. Sofía aceptó jugar y estuvo jugando durante un rato hasta que se cansó y decidió dormir un poco.
Mientras dormía, recibió una llamada de su madre. Hablaron por unos minutos y luego colgó el teléfono. Pero para sorpresa de Sofía, la llamada se repitió una y otra vez sin cesar.
Intentó colgar varias veces pero no podía detener la repetición constante de la conversación con su madre. De repente, el autobús comenzó a sacudirse violentamente como si estuviera atravesando una tormenta eléctrica. Sofía estaba asustada y confundida cuando finalmente se detuvo todo.
Cuando abrió los ojos, descubrió que estaba nuevamente en el mismo lugar donde había tomado el autobús por primera vez. Se dio cuenta entonces que estaba atrapada en un bucle temporal.
Sofía intentaba salir del bucle temporal haciendo cosas diferentes cada vez que volviera al inicio del viaje pero nada funcionaba hasta que tuvo la idea de hablar con el conductor. "¿Qué está pasando aquí? ¿Por qué estamos atrapados en este bucle temporal?" - preguntó Sofía.
El conductor le explicó que había un hechizo mágico que mantenía a todos los pasajeros y al autobús atrapados en ese ciclo infinito. Pero también le dio una solución: debían encontrar un objeto especial escondido dentro del autobús para romper el hechizo.
Sofía y el conductor buscaron por todo el autobús hasta que finalmente encontraron un pequeño cofre dorado debajo de uno de los asientos. Al abrirlo, se liberó una luz brillante que rompió el hechizo y permitió que todos salieran del bucle temporal.
Sofía aprendió la importancia de no rendirse ante las adversidades y cómo trabajar juntos puede llevar a grandes resultados. Desde entonces, ella siempre recordaría esta experiencia como una oportunidad para crecer y superar obstáculos difíciles.
FIN.