El Baile de Leo



Había una vez un grupo de amigos que se reunían todas las noches para bailar y divertirse al ritmo del rock. Ellos eran Juan, Sofía, Martín, Ana y Lucas.

Un día, mientras estaban ensayando en el garaje de Juan, se dieron cuenta de que algo faltaba en su baile. No lograban coordinarse bien y sentían que les faltaba energía. "No sé qué pasa chicos, pero nuestro baile no está funcionando como antes", dijo Martín preocupado.

"Tal vez necesitamos practicar más", sugirió Ana. Pero por más que practicaran, seguían sin encontrar la solución a su problema. Fue entonces cuando decidieron buscar ayuda externa y acudieron a un famoso bailarín llamado Leo.

Leo los recibió con una gran sonrisa y los invitó a su estudio de danza para enseñarles algunos trucos para mejorar su performance.

"Lo primero que deben hacer es relajarse y dejarse llevar por la música", les explicó Leo mientras movía sus pies con elegancia. Los amigos siguieron atentamente las instrucciones del bailarín y poco a poco comenzaron a sentirse más cómodos con sus movimientos. Además, aprendieron nuevos pasos que les dieron un toque fresco y original a su coreografía.

"¡Increíble! ¡Nunca habíamos bailado así!", exclamó Sofía emocionada al terminar la sesión con Leo. Con las nuevas herramientas adquiridas gracias al consejo del experto en danza, los amigos volvieron a ensayar en el garaje de Juan con renovadas energías.

Esta vez sí lograron coordinar sus movimientos y su baile se veía más fluido y dinámico. "¡Estamos listos para presentarnos en el concurso de bandas!", gritó Lucas entusiasmado.

El día del concurso llegó y los amigos subieron al escenario con confianza. Su baile fue elogiado por todos los presentes, quienes no dudaron en aplaudirlos de pie. Finalmente, fueron declarados ganadores del primer premio.

"Gracias a Leo pudimos mejorar nuestro baile y llevarnos este trofeo a casa", dijo Juan emocionado mientras sostenía el galardón en sus manos. Desde ese día, los amigos siguieron bailando juntos cada noche pero ahora lo hacían con una mayor seguridad y habilidad.

Además, nunca olvidaron la importancia de pedir ayuda cuando algo no funciona bien y de seguir aprendiendo siempre para mejorar en lo que hacen.

FIN.

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