El bosque de la amistad

En un hermoso bosque, vivía un conejo llamado Pepe, conocido por su corazón bondadoso y su deseo de hacer felices a todos los que lo rodeaban. Un día, mientras saltaba por el bosque, Pepe escuchó sollozos entre los árboles.

Se acercó con curiosidad y encontró a una pequeña conejita llamada Coby, que estaba sentada triste y solitaria. '¿Qué te sucede, amiguita?' preguntó Pepe con cariño.

Coby levantó la mirada y explicó que se sentía sola porque se había perdido de su familia. Pepe, con una sonrisa amable, le ofreció su ayuda. Juntos, emprendieron un viaje por el bosque, hablando y compartiendo risas.

Pepe le enseñó a Coby a reconocer las plantas comestibles y los lugares seguros, mientras le contaba historias de aventuras y amistad. Con el paso del tiempo, la tristeza de Coby se fue disipando, y en su corazón creció un sentimiento de gratitud y cariño por su nuevo amigo Pepe.

Finalmente, después de varios días, encontraron a la familia de Coby. La conejita saltó de alegría al reencontrarse con los suyos, pero también sintió tristeza al tener que despedirse de Pepe.

Sin embargo, Pepe le recordó que siempre tendrían un lugar para visitarse en el bosque de la amistad. Con abrazos y promesas de reencuentro, Coby se despidió, sabiendo que ahora tenía un amigo para siempre en Pepe.