El bosque de la mariposa y la oruga
En un hermoso bosque, vivía una mariposa de muchos colores llamada Aurora. Aurora era diferente a las demás mariposas, ya que le encantaba leer cuentos y aprender sobre el mundo que la rodeaba.
Pasaba horas y horas en su rincón favorito del bosque, leyendo junto a sus amigos animales. Aurora tenía una gran amistad con todos los animales del bosque: el conejo Lucas, el zorro Maxi, la ardilla Sofía y el búho Pablo.
Juntos compartían aventuras y descubrían cosas nuevas cada día. Pero había alguien que no les caía bien a ninguno de ellos: la oruga Cloe. Cloe siempre estaba molestando a los demás animales con sus comentarios negativos y su actitud egoísta.
No entendía por qué Aurora disfrutaba tanto de leer y siempre la criticaba por ser diferente al resto de las mariposas. Cloe decía que leer era aburrido y que ella prefería pasar su tiempo comiendo hojas sin preocuparse por nada más.
Un día, mientras Aurora estaba leyendo un cuento sobre la importancia de valorar nuestras diferencias, se dio cuenta de algo muy triste: Cloe nunca había tenido la oportunidad de experimentar lo maravilloso que era sumergirse en las páginas de un libro.
Decidida a ayudar a su enemiga a descubrir el mundo mágico de los cuentos, Aurora se acercó a Cloe con una sonrisa amigable. "Hola Cloe", dijo Aurora con voz dulce. "He estado pensando mucho en ti últimamente.
Creo que podrías disfrutar mucho si te das la oportunidad de leer un cuento conmigo y los demás animales del bosque". Cloe miró a Aurora con desconfianza, pero su curiosidad comenzó a despertar.
Aunque no quería admitirlo, sentía cierta intriga por saber qué era lo que tanto disfrutaban sus amigos. "¿Qué te hace pensar que yo podría disfrutar de algo tan aburrido como leer?", preguntó Cloe con tono burlón.
Aurora se acercó un poco más y le respondió con ternura:"Cloe, sé que eres diferente a nosotros y eso está bien. Todos tenemos nuestras propias pasiones y formas de disfrutar la vida. Leer nos permite viajar a lugares mágicos sin movernos de nuestro rincón en el bosque.
Te prometo que si te das la oportunidad de leer un cuento con nosotros, descubrirás algo maravilloso". A pesar de sus dudas, Cloe decidió aceptar la invitación de Aurora.
Esa tarde, todos los animales del bosque se reunieron alrededor de Aurora para escuchar uno de sus cuentos favoritos. Con cada palabra que Aurora pronunciaba, Cloe se sumergía más en la historia.
Poco a poco, empezó a sentir esa magia especial que solo los cuentos pueden transmitir: imaginaba paisajes increíbles, conocía personajes fascinantes y experimentaba emociones intensas. Al terminar el cuento, Cloe estaba extasiada. Nunca había imaginado que un simple libro pudiera transportarla tan lejos y hacerla sentir tantas cosas diferentes.
Desde ese día, Cloe dejó atrás su actitud negativa y decidió abrir su mente hacia nuevas experiencias. Comenzó a leer más cuentos, a compartir momentos con Aurora y los demás animales del bosque.
Aprendió que todos somos diferentes y eso es lo que nos hace únicos y especiales. La amistad entre Aurora y Cloe se fortaleció cada vez más, demostrando que incluso las enemistades pueden convertirse en hermosas relaciones si estamos dispuestos a dar una oportunidad a los demás.
Y así, en ese maravilloso bosque, la mariposa de muchos colores enseñó a la oruga la importancia de valorar nuestras diferencias y descubrir el mundo mágico de los cuentos. Juntos, siguieron viviendo aventuras inolvidables junto al resto de los animales del bosque.
Y aunque cada uno tenía sus propias pasiones, aprendieron que siempre había algo nuevo por descubrir cuando estaban juntos.
FIN.