El bosque de las flores mágicas

Había una vez una hermosa mariposa llamada Margarita que volaba con gracia por el bosque en busca de una flor especial.

Un día, mientras revoloteaba entre los árboles, se encontró con una pequeña hormiga llamada Florencia, que llevaba unas hojas muy grandes. - ¡Hola amiga hormiga! ¿Sabes dónde puedo encontrar un lugar con muchas flores? - preguntó Margarita con entusiasmo.

Florencia, la hormiga, respondió con una sonrisa amigable, - Claro que sí, conozco un lugar mágico donde las flores brillan con colores maravillosos, pero está muy lejos. Margarita emocionada exclamó, - ¡Oh, por favor, dime dónde es! Viajaremos juntas, ¡será una aventura maravillosa! Así, juntas emprendieron su viaje hacia el bosque de las flores mágicas.

Durante su travesía, se encontraron con diversos desafíos que pusieron a prueba su valentía y amistad. Superaron ríos, montañas y encontraron nuevos amigos como un sapo cantarín y una mariposa luminosa.

Finalmente, llegaron al maravilloso bosque de las flores mágicas, donde cada flor desprendía un brillo especial. Margarita y Florencia se maravillaron con la belleza del lugar, y comprendieron que la verdadera magia reside en la amistad y en ayudarse mutuamente.

Desde ese día, visitaban el bosque mágico juntas, recordando que la amistad y el trabajo en equipo siempre llevan a los lugares más asombrosos.